Tras el bloqueo de los accesos de Chuquicamata el miércoles y luego de retomar ayer las negociaciones con la empresa, los dirigentes de los sindicatos 1, 2 y 3 de Chuquicamata buscan acelerar las negociaciones para terminar antes de Navidad.

Así accederían al bono de pronta firma, que se entrega si el proceso finaliza, a más tardar, entre el 21 y 23 de diciembre. El actual contrato vence el 31 de diciembre.

"Estamos un poco contra el tiempo. Queremos apostar a terminar antes de la Navidad, pero eso no se puede asegurar", comentó la dirigenta Marcela Matamoro. Ayer en la mañana, los dirigentes de los sindicatos revisaron el programa de trabajo para los próximos días, concluyeron que el plazo es estrecho, ya que mañana y el domingo no habrá reuniones, por las elecciones. En la tarde iniciaron las conversaciones con la empresa en un hotel de Calama.

Los trabajadores pretenden tener un BTN (bono de término de negociación), por lo menos, superior al de la División Andina ($ 10 millones). El BTN incluye bonos como el por precio del cobre o por pronta firma. Este último podría superar los $ 6 millones -monto similar al recibido en la negociación de 2006- y se sumará al bono por término de conflicto que superará los $ 2 millones. Con esto podrían acceder a bonos por unos $ 9 millones, cifra lejana a los $ 14 millones que lograron los trabajadores de Minera Escondida.

Para llegar a un nivel similar al de la minera privada en Codelco afirman que los trabajadores deben reducir beneficios. Al inicio de la negociación, que partió el sábado, la minera propuso nuevos bonos a cambio de eliminar beneficios históricos. Entre ellos, una reducción de las vacaciones y flexibilidad para contratar y despedir trabajadores. La propuesta no gustó y generó los bloqueos de las faenas que paralizaron, el miércoles, Chuquicamata. Ese día la minera perdió US$ 8 millones.

Esta situación llevó a Codelco a retirar su propuesta, pero según fuentes de la empresa, en la negociación volverán a sugerir el tema. Para Codelco eso es clave, porque  hay costos estructurales que debe bajar, a raíz de la caída de la productividad y leyes del yacimiento.

Algunos dirigentes sindicales dejan abierta la posibilidad de negociar la oferta que haga la empresa. "Ya tenemos todos los beneficios históricos. Hoy partimos desde el contrato que tenemos actualmente hacia adelante", pero esto no significa que, "efectivamente, la administración pueda venir y plantearnos alguna modificación, lo que sería parte de la negociación", afirmó Matamoro.

Según Jaime Graz, director del sindicato 1, la idea es conservar los actuales beneficios y mejorarlos. Sin embargo, no descartó que pueda abrirse una flexibilización de los beneficios históricos, dependiendo de lo que ofrezca la empresa y acepten los socios. No obstante, otros representantes del sindicato, como Héctor Rocco, insisten en que no transarán beneficios históricos. En esa línea, el dirigente Armando Silva explicó que pueden acceder a bonos mayores comprometiendo una mayor productividad.

Ayer, Codelco precisó que nunca estuvo en su propósito eliminar unilateralmente beneficios históricos de los trabajadores.