Los sindicatos CCOO y UGT, las patronales de pequeñas y medianas empresas Pimec y Cecot y las entidades soberanistas llamaron hoy a parar Cataluña este martes, en respuesta a la "violencia ejercida por las fuerzas de seguridad del Estado". La decisión, según fuentes sindicales, va "más allá" de una huelga general, aunque otras fuentes aseguraron que todavía no se ha concretado cómo se parará la actividad.
Jordi Cuixart, presidente de Òmnium, animó a los catalanes a sumarse a la consigna de la mesa democrática que reúne a todas estas instituciones y entidades Cuixart hizo el llamamiento, que desde hace días también reclama la CUP, en el acto organizado por el soberanismo en la plaza de Catalunya para seguir el escrutinio de los resultados del referéndum.
El acuerdo sobre el paro se fraguó en la tarde de este domingo en la sede de CCOO a la que asistieron, entre otros, el vicepresidente Oriol Junqueras; Jordi Sánchez, presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), y Cuixart. Hasta anoche había convocada una huelga general para el martes, secundada por los sindicatos minoritarios CGT, Intersindical Alternativa de Catalunya (IAC), Intersindical CSC y COS.
Se trata de organizaciones clave en algunos sectores como el transporte o la educación, pero los sindicatos mayoritarios rechazaron unirse a ella. Sin embargo, tras la jornada del domingo, Cuixart anunció que la Mesa por la Democracia, que también integran patronales como Pimec y Cecot, Unió de Pagesos y entidades sociales, llamaba a la "huelga general" para el martes.
En esos momentos, sin embargo, las entidades todavía estaban cerrando el documento final de esa convocatoria. Minutos después, Dolors Llobet, secretaria de Coordinación de CCOO, anunció que en realidad se había acordado un "paro de país" al que están llamados patronales, empresarios, autónomos, trabajadores, sindicatos e instituciones. Además, pidieron a todos los ciudadanos que se concentren delante de sus puestos de trabajo, ayuntamientos y, en el caso de Barcelona, en la plaza Universitat para protestar contra la "vulneración" de "derechos fundamentales y libertades democráticas" que, a su juicio, llevaron a cabo este domingo las fuerzas de seguridad del Estado al "desalojar violentamente" a miles de ciudadanos que estaban en los colegios.
Tras la violenta jornada, el soberanismo se reafirmó durante la jornada en sus convicciones y quiso así dar una respuesta contundente para mostrar su enérgica protesta. Sánchez criticó con dureza la "irracionalidad" del Estado por la actuación de las fuerzas de seguridad en varios centros de votación del referéndum. "Alguien en La Moncloa se ha equivocado, pero estamos convencidos de que Europa, finalmente, tomará nota de esta actitud absolutamente antidemocrática del Estado y contraria a los más fundamentales derechos de los ciudadanos", afirmó, confiando en que habrá una reacción internacional.
Las entidades soberanistas habían programado una fiesta en la plaza de Cataluña que quedó empañada por el balance de más 800 heridos, dos de ellos graves.
"Ha sido un día histórico y nos tenemos que sentir orgullosos. Con las imágenes de violencia, mucha gente se pudo quedar en casa y fue a votar", afirmó Cuixart antes de anunciar la huelga. "Presidente, no nos falles. Vienen momentos trascendentes en la historia de nuestro país", agregó Sánchez.