Desde que el proyecto legislativo ingresó al parlamento en 2010, los expertos en siquiatría y neurología pediátrica han manifestado su postura contra la eliminación del compuesto timerosal en las vacunas. Esta tarde, la moción se convirtió en Ley y desde la Sociedad de Psiquiatría y Neurología de la Infancia y Adolescencia (SOPNIA), ratificaron a La Tercera nuevamente su rechazo a que rija la norma: "debemos informar a la comunidad que la información científica disponible en la actualidad no permite concluir relación alguna entre el uso de vacunas que contienen timerosal y el desarrollo del autismo", aclaró Viviana Venegas, presidenta de la entidad.
La especialista indicó además que "como profesionales de la salud, queremos destacar también que no tenemos ningún conflicto de interés al respecto, al contrario, se trata de pruebas científicas", concluyó.
En efecto, instituciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Food and Drugs Administration (FDA) y la Academia Americana de Pediatría han ratificado la nula relación entre timerosal de las vacunas y el autismo, en sus informes públicos.
Según Venegas, en 2010 cuando ingresó la norma al parlamento, "se revisó toda la literatura científica y se encontraron 10 trabajos que buscaban una relación entre timerosal y desarrollo de autismo. Ocho de ellos eran de diferentes autores y muestran que no existe relación, mientras que otros dos, que sí mostraron una relación, ambos artículos eran del mismo autor y con errores metodológicos que pusieron en duda sus conclusiones", aseguro la experta.