Autoridades iraníes aseguraron este domingo que hay al menos 145 muertos y más de 800 heridos por un sismo de 7,3 grados en la escala de Richter en la región fronteriza con Irak.

Al menos siete personas murieron en la ciudad iraní de Ghasr Shirin, en la provincia occidental de Kermanshah. Por su parte, el gobernador de Ghasr Shirin, Faramarz Akbarí, y el director de los Servicios de Emergencia de Irán, Pir Hosein Kolivand, informó que habían al menos dos fallecidos, aunque la agencia Fars elevó esta cifra a seis.

Los heridos ascienden a 60 en Ghasr Shirin, según Kolivand, citado por la agencia Isna, quien descartó que se hayan registrado víctimas en otras provincias del país afectadas por las réplicas.

Según las autoridades, tomará un tiempo cuantificar los daños debido a que tanto las comunicaciones telefónicas como el sistema eléctrico han sufrido cortes, según los responsables iraníes. Los habitantes de Ghasr Shirin han salido a la calle ante el temor de que se derrumben los edificios y al lugar se han desplazado numerosas ambulancias.

El Centro Sismológico de Irán, dependiente de la Universidad de Teherán, informó de un terremoto de 7,3 grados en la escala de Richter y a 11 kilómetros de profundidad en la localidad de Azgale, también en Kermanshah.