A comienzos de este año, Stora Enso y su socia chilena Arauco compraron un molino de pulpa y 136.000 hectáreas de tierras en Uruguay a la española Ence, pero dejaron pendiente la decisión de invertir en nueva capacidad.

"Estamos iniciando los estudios de evaluación en este momento, y es normalmente un proceso que toma un año. Solo podemos especular sobre cuándo podríamos comenzar a construir y primero tenemos que ver qué construimos", dijo el presidente financiero de Stora Enso, Markus Rauramo, a la agencia de noticias sueca SIX en una entrevista.

"Un molino de pulpa con una capacidad anual de 1.000 millones de toneladas es una inversión de cerca de 1.000 millones de euros", añadió.