El sargento del ejército de EEUU Robert Bales afronta 17 acusaciones de homicidio y seis de intento de asesinato "además de otros cargos" por su implicancia en la matanza a tiros ocurrida en dos aldeas del sur de Afganistán.

Los acontecimientos suscitaron la indignación en Estados Unidos y deterioraron aún más los ví­nculos entre los gobiernos de ambas naciones.

La lectura de los cargos contra Bales se efectuará el viernes en la prisión militar de Fort Leavenworth, Kansas, donde se le mantiene retenido tras su traslado en avión la semana pasada desde Afganistán, dijo un funcionario estadounidense.

Además de homicidio e intento de asesinato, los cargos incluirán seis por agresión grave así­ como un número de otras infracciones a la ley militar, dijo un funcionario que solicitó el anonimato para hacer declaraciones a la prensa antes de la presentación de las acusaciones.

El soldado, de 38 años, y padre de dos hijos, vive en Lake Tapps, Washington. Afronta juicio de acuerdo con el Código Uniforme de Justicia Militar, pero podrí­an pasar meses antes de que tenga lugar alguna audiencia pública.

Las autoridades militares habí­an dicho en un principio que Bales era sospechoso del homicidio de 16 aldeanos afganos, nueve niños y siete adultos. Las autoridades aumentaron el jueves la cifra de ví­ctimas a 17, sin explicar la variación.

Es posible que algunos de los muertos fueran sepultados antes de la llegada de los oficiales militares estadounidense al lugar de las matanzas. Seis afganos resultaron heridos en las agresiones.