El número de estadounidenses que pidió subsidio por estar desempleado subió la semana pasada de manera inesperada, lo que sugiere que el mercado laboral se está recuperando con demasiada lentitud como para lograr una baja de la tasa de desempleo.
La cantidad de pedidos del beneficio aumentó en 4.000 a una cifra ajustada estacionalmente de 372.000 y llegó a su nivel más alto en cinco semanas, mostraron el jueves cifras oficiales.
El mercado esperaba 365.000 solicitudes. Las cifras mantienen la presión sobre el presidente Barack Obama, que busca ser reelecto en noviembre, y renovarían las críticas de su rival republicano, Mitt Romney, por la alta tasa de desempleo que se ha instalado durante la presidencia del actual mandatario.
Las cifras sobre las solicitudes de desempleo cubren la misma semana en la que el Gobierno realiza su sondeo para medir la creación mensual de empleo y mostraron una leve baja en los despidos respecto del sondeo del mes pasado, lo cual es una señal positiva para el ritmo de contratación de agosto.
El promedio móvil de cuatro semanas, considerado un mejor parámetro del mercado laboral porque suaviza la volatilidad del dato semanal, subió levemente a 368.000 solicitudes, aunque se ubicó un 2,1 % por debajo de la segunda semana de julio.
En esa semana, el Gobierno consultó a empleadores y concluyó que en julio se habían creado 163.000 empleos, una mejora respecto de los tres meses previos, pese a que la tasa de desempleo subió una décima a un 8,3 %.
El Gobierno publicará su informe sobre la creación de empleo de agosto el 7 de septiembre.
Un funcionario del Departamento de Trabajo dijo que no había habido nada inusual en las cifras sobre las solicitudes de seguro por desempleo. La cifra de la semana inmediatamente
anterior fue revisada para mostrar unos 368.000 pedidos frente a los 366.000 estimados inicialmente.
El número de personas que siguió recibiendo beneficios por desempleo bajo los programas estatales regulares tras pedir una primera semana de ayuda subió en 4.000 a 3,317 millones en la semana terminada el 11 de agosto.
En total, 5,59 millones de estadounidenses recibieron beneficios bajo todos los programas existentes en la semana al 4 de agosto, lo que representa una baja de 109.812 respecto de la semana anterior.