La solución a la situación de la activista saharaui Aminatu Haidar, en huelga de hambre en España desde hace más de un mes, podría estar próxima: el Parlamento Europeo retiró hoy una resolución que prentedía aprobar por la tarde porque cree en las próximas 24 horas podría estar ya en su casa.

"En el curso del día de hoy se vislumbrará una solución para la situación de Aminatu Haidar, por lo que propongo que se suprima este punto del orden del día para que no interfiera en las negociaciones diplomáticas. Le ayudaremos más a la señora Haidar callados que votando una resolución", dijo hoy el europarlamentario alemán Martin Schulz.

"Es un buen gesto apoyar la intensidad del trabajo diplomático conducido por el gobierno de España, que es el gobierno del país donde está Haidar. Debemos evitar una resolución que pueda impedir el desarrollo de las negociaciones que están teniendo lugar", dijo por su parte el socialista español Juan Fernando López Aguilar.

Con su huelga de hambre, la activista exige regresar al Sahara Occidental, de donde fue expulsada por Marruecos el 14 de noviembre.

El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, había manifestado por la mañana en los pasillos del Congreso de los Diputados en Madrid que la solución a la situación de la activista iba "mejor", al ser inquirido por los periodistas.

Haidar, de 42 años, fue hospitalizada durante la madrugada de hoy de forma voluntaria en la isla de Lanzarote, para recibir tratamiento para los dolores abdominales y de estómago que sufre por la falta de alimento. Los médicos le suministraron suero en vena para que recupere líquidos y está siendo tratada con calmantes y antieméticos.

Su salud se ha deteriorado fuertemente en los últimos días. El miércoles sufrió vómitos y mareos en la habitación del aeropuerto de Lanzarote en la que lleva a cabo su protesta.

Haidar arribó al aeropuerto de Lanzarote el pasado 14 de noviembre, después de que las autoridades marroquíes la retuvieran durante un día en El Aaiún, la capital de la antigua colonia española que Marruecos ocupó en 1975.

Regresaba de Estados Unidos, tras recoger en Nueva York un premio a su lucha cívica, y después de que le quitaran su pasaporte, Marruecos la expulsó a España, donde tiene un permiso de residencia para que pueda ser tratada por problemas de salud.

Marruecos, que la acusa de ser agente del Frente Polisario, se muestra inflexible en su postura de no dejarla regresar.

Su ministro de Economía, Salaheddine Mazouar, reconoció hoy en Madrid, en el marco de un desayuno informativo, que el caso Haidar está poniendo al país magrebí "en una situación difícil", si bien acusó a la saharaui de crear ella el problema y de estar "manipulada" por Argelia y el Frente Polisario. "Quieren convertir un problema humanitario en político", indicó Mazouar.