La suerte de las economías más vulnerables de la zona euro ha empeorado notablemente desde junio, según un sondeo de economistas elaborado por Reuters que mostró que la mayoría de los encuestados España pedirá un rescate en cuestión de meses.

 Los encuestados esta semana rebajaron su perspectiva económica para Grecia, España y Portugal, y dijeron que ninguno lograría los objetivos de déficit acordados con la Comisión
Europea.

Entre las economías periféricas en problemas de la zona euro, sólo Irlanda parece encaminada a volver a un leve crecimiento a corto plazo.

Aunque el sondeo apunta a una reducida probabilidad de que Grecia abandone pronto la zona euro, destaca el por qué España es el nuevo centro de atención en la crisis de deuda soberana.

Sus problemas económicos, con el creciente desempleo entre los primeros de la lista, aún tienen un largo tramo que recorrer.

 "Mientras España esté en una profunda recesión, los mercados seguirán teniendo dudas sobre la solvencia de España a medio plazo", dijo Gernot Griebling, jefe de análisis de bonos de LBBW en Stuttgart.

"Por ello los rendimientos (de los bonos) españoles y sus correspondientes diferenciales sobre los Bunds permanecerán altos o incluso subirán", dijo.

La semana pasada, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, se acercó más a solicitar un rescate de la Unión Europea para su país, donde los costos de endeudamiento soberano no han retrocedido desde sus niveles casi insostenibles.


Economistas dijeron que había una probabilidad mediana de un 68 por ciento de un rescate soberano, que involucre los fondos de rescate oficiales de la UE, antes de fines de año. El sondeo de junio mostró que 35 de 59 economistas pensaban que eso era "probable" o "muy probable".

El presidente del BCE, Mario Draghi, indicó la semana pasada que se preparaba para comprar bonos españoles e italianos, pero sólo después de que los fondos de rescate de la UE entraran en acción y los países hayan solicitado ayuda.

El sondeo sugería que la economía española se contraerá un 1,6 por ciento este año y luego un 1,1 por ciento en el 2013, con un fuerte declive del 0,7 por ciento respecto del sondeo de junio.

La tasa de desempleo, que en un 24,6 por ciento tocó su nivel más alto en el segundo trimestre desde que terminó la dictadura de Franco a mediados de la década de 1970, podría subir incluso más.

El sondeo arrojó que la desocupación terminaría el año en un 25 por ciento y el próximo año en un 25,6 por ciento.

España tampoco cumplirá con sus metas de déficit presupuestario, incluso luego de que los ministros de la zona euro le otorgaran a Madrid un año adicional hasta el 2014 para alcanzar sus objetivos.

Aunque se acercará al cumplimiento del objetivo de déficit de este año del 6,3 por ciento, en 2013 sólo alcanzará un déficit del 5,0 por ciento, lo que incumpliría el objetivo del 4,5 por ciento, siempre según el sondeo.