¿Cuál es la mejor ciudad para vivir, trabajar, estudiar o visitar? Según el estudio Barómetro Imagen Ciudad, realizado por la consultora Visión Humana en 1.880 personas de 23 ciudades del país, Viña del Mar (55%), Valparaíso (45%) y La Serena (44%) acaparan los mejores puntajes globales, siguiendo la tendencia de las dos mediciones anteriores.

Santiago es la ciudad que más cambios en la percepción de las personas muestra. Aparece en el quinto lugar (40% de los votos), dos puestos más abajo que hace dos años en el ranking global.

Es el segundo mejor lugar para trabajar (en 2011 era el primero) y el 16º mejor lugar para vivir (hace dos años era décimo). La capital sólo destaca en el ítem mejor lugar para estudiar (52%) donde encabeza el ranking como en las anteriores encuestas. "La imagen que proyectan las ciudades en personas externas a éstas determinan importantes decisiones sobre su potencial desarrollo. Y no sólo me refiero sólo al turístico, sino que a la capacidad de atraer talento, inversiones e innovación y de generar identidad y compromiso en quienes residen en ellas", dice Patricio Polizzi, director general de Visión Humana.

VIÑA DEL MAR

Por tercer año, Viña del Mar es la ciudad que lidera la evaluación global. Es elegida como la mejor para vivir (52%), trabajar (43%) y visitar (74%). Le siguen La Serena (44%), Valparaíso (34%), Valdivia (33%) y Concepción (30%) como las mejores para vivir.

Arturo Orellana, investigador del Centro de Desarrollo Urbano Sustentable, Cedeus, explica que Viña del Mar constituye en el imaginario urbano una de las ciudades más atractivas, pues las personas proyectan en ella una buena calidad de vida, debido a que es una ciudad interesante en el diseño del eje de la costa. "Si tú preguntas en el mundo cuál es la mejor ciudad para vivir, la mayoría responde Río de Janeiro. Viña del Mar es nuestro Río de Janeiro criollo, tiene una imagen en la memoria de todos muy positiva. Y eso pasa porque vivir cerca del mar es uno de los elementos más valiosos para las personas en todo el mundo, ya que regula el clima y otorga un paisaje que mezcla la vida cotidiana con el ocio. No es necesario tener grandes plazas ni parques porque está el mar, se disfruta incluso de la vista".

A eso se agrega que es uno de los pocos balnearios-ciudad que hay en el país, con arquitectura de barrio y vida universitaria. "Tiene cierto grado cosmopolita que pocas ciudades en Chile ofrecen", dice.

Eso explica también la alta votación de La Serena: su mezcla de ciudad funcional y playas. Y la aparición de Iquique y Arica entre las siete mejores para vivir.

SANTIAGO A LA BAJA

La imagen que proyecta la capital es más compleja de analizar, debido al collage urbano que muestra por sus diferencias sociales, explica el investigador de Cedeus.

Su fuerte es su oferta de servicios, que es superior a la del resto del país, como viviendas, escuelas y universidades, cultura y trabajo. En esta última también destacan Antofagasta y Calama.

"En el resto del país también se ve a Santiago desde un discurso odioso. Eso porque hay una especie de castigo en el imaginario por ser el centro del poder", dice.

Además, se le vincula a cosas negativas. Al pedirles a los entrevistados que describieran espontáneamente a las ciudades nombradas en una palabra, esmog, estrés e inseguridad ciudadana fueron las más asociadas a la capital.

¿Las peor evaluadas? Talca, Curicó y Talcahuano. En el caso de Talca, dice Orellana, es una ciudad que no es atractiva turísticamente y cuya población tiende a expandirse y a mostrar interés por vivir fuera.

En el caso de Talcahuano, es una ciudad industrial que no se proyecta en lo moderno, sin centros universitarios importantes. "Son tres casos de ciudades de paso, que no representan en el imaginario urbano de las nuevas generaciones un destino interesante desde el punto de vista de movilidad laboral", asegura.

Mientras que Concepción, Valdivia, Puerto Montt e Iquique destacan entre las top ten de varios de los ítems evaluados, especialmente como lugares deseables para vivir o visitar.