Vencedor por una mínima ventaja (de solo 1,49 puntos porcentuales) en las elecciones presidenciales del 14 de abril, impugnadas por la oposición, y heredero de una crisis económica que se agudizó en los últimos meses de vida de Hugo Chávez, Nicolás Maduro claramente no cuenta con el beneplácito de la opinión pública venezolana, a diferencia del fallecido mandatario. Así, al menos, se desprende de una reciente encuesta elaborada por el Instituto Venezolano de Análisis de Datos (Ivad), la cual revela que si se repitieran los comicios, el actual Presidente perdería ante el líder opositor, Henrique Capriles, por una diferencia de cinco puntos porcentuales.
Según la última medición efectuada por el Ivad, entre el 28 de abril y el 5 de mayo, Capriles tiene una intención de voto del 45,8%, mientras que Maduro solo 40,8%. En las elecciones de abril, el candidato oficialista se impuso con el 50,61% de los votos, frente al 49,12% que logró el abanderado de la oposición. El último sondeo de la encuestadora previo a los comicios dijo que Maduro ganaría con un 53,3%, y a Capriles le concedió entonces un 34,7% de apoyo.
"Capriles se ha movido bien después de las elecciones, sobre todo en el manejo de su protesta con relación a los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE). A Maduro le ha hecho daño el no haber sabido encarar adecuadamente dicha protesta y los venezolanos en su mayoría rechazan que no se hayan aclarado las cosas", explica a La Tercera el analista venezolano Ignacio Avalos.
En ese sentido, la encuesta de Ivad muestra que la petición de una auditoría completa realizada por Capriles es respaldada por el 61,2% de los venezolanos. No obstante, apenas el 44,3% considera que existen suficientes elementos para impugnar las elecciones. El líder opositor reclamó ayer al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que se pronuncie sobre si admite o no las impugnaciones de los comicios, porque según él, "hace rato que se venció el lapso para la admisión".
Asimismo, el 51,3% de los consultados posee una opinión negativa de la situación del país; incluso el 18% cree que la situación es muy mala. Si solo se evalúa la percepción sobre la situación política, el 56,7% se inclina por referirse a ella como "inestable". Al evaluar quiénes son los principales responsables de los problemas que afectan a Venezuela, el 49% responsabiliza directamente al gobierno, mientras que apenas un 10,2% señala a la oposición.
"A Maduro le ha explotado en la cara la bomba que le dejó Chávez: la situación económica, en particular en lo que afecta la vida cotidiana de la gente (inflación, desabastecimiento). Está pagando los platos rotos de su antecesor", señala Avalos.
La única variable que aún es favorable para Maduro es la vinculada a su desempeño como gobernante. Mientras un 51,3% tiene una percepción positiva del inicio de gestión, el 46,7% cree que su trabajo es negativo. Un sondeo previo del Ivad, realizado del 24 al 31 de marzo, el 57,2% señaló que la gestión del actual gobierno era positiva, mientras que un 34,2% la calificó de negativa.
La caída en la valoración de la gestión de Maduro contrasta con la percepción positiva que despierta la oposición. Según el Ivad, el 62,2% valora el trabajo de este sector. Incluso, al definir los bloques políticos, el oficialista alcanza 40,7%, mientras que el opositor un 44,3%.