La emblemática fotografía tomada por Robert Capa de un miliciano español cayendo por un disparo durante la Guerra Civil Española fue una de las imágenes más famosas y duraderas de los conflictos en el siglo XX, pero ahora investigadores españoles que han estudiado los acontecimientos que rodearon la foto creen que pudo haber sido un montaje.
Para los españoles, la foto del Miliciano caído es un recordatorio vívido de la guerra civil de 1936-39 que dividió profundamente una nación y costó por lo menos medio millón de vidas. Para Capa fue la imagen que catapultó su carrera como el fotógrafo de guerra más famoso del mundo.
Cuando se publicó por primera vez en septiembre de 1936 en la revista francesa Vu, y posteriormente en Life, la leyenda de la foto Miliciano caído decía que reflejaba el momento en que un miliciano republicano caía mortalmente herido.
Se indicó que la escena ocurrió en el Cerro Muriano, en el frente de batalla de Córdoba, donde las fuerzas que respaldaban al general Francisco Franco libraban combates intensos con soldados leales al gobierno republicano.
Ahora, investigadores españoles creen que la fotografía no fue tomada en ese lugar y que el miliciano probablemente tampoco fue baleado.
Después de estudiar la foto y nuevas imágenes difundidas como parte de una exhibición rodante titulada Esto es guerra, en el Museo de Arte de Barcelona, cuatro investigadores dijeron que las fotos fueron tomadas a 55 kilómetros (34 millas) de distancia, en un área donde no había combates en ese momento.
"Se nos evidenció rápidamente que entre las nuevas fotos -34 atribuidas a Capa y seis a su compañera Gerda Taro- había cuatro que revelaban el lugar exacto donde Capa había tomado las imágenes", dijo el cineasta Raúl Riebenbauer a The Associated Press.
El historiador Francisco Moreno precisó las características geográficas de las fotos -la forma de siete colinas, la ubicación de dos granjas y varios caminos- y halló que coincidían exactamente con un lugar al este del pueblo de Espejo.
El Centro Internacional de Fotografía, fundado por el hermano de Capa, Cornell y custodio de su legado, ha pasado 25 años tratando de confirmar la veracidad de la imagen, dijo a The Associated Press el director Buzz Hartshorn.
Riebenbauer dijo que él y sus colegas estudiaron la foto junto con médicos forenses y plantearon varias dudas. Entre otras cosas no hallaron evidencias de ninguna herida de bala.
El hecho de que la revista Vu publicó otra foto de Capa de otro miliciano muerto a tiros exactamente en el mismo lugar también provocó suspicacias. Aun el biógrafo de Capa, Richard Whelan, tuvo dudas sobre el Miliciano caído.
Capa, cuyo lema era "Si tus fotografías no son suficientemente buenas es que no estás suficientemente cerca", murió al pisar una mina terrestre en Vietnam, cámara en mano.