El análisis de los dientes de un adolescente enterrado hace 3.550 años cerca del conjunto de piedras reveló que provenía de la región del Mediterráneo, probablemente España, Italia o el sur de Francia.
El joven también llevaba un collar de ámbar, lo que sugiere que procedía de una familia acomodada.
Los arqueólogos creen que eso indica que Stonehenge ya gozaba para entonces de una extendida fama como monumento espectacular.
Es posible, estiman, que el conjunto prehistórico atrajera viajeros desde lugares entonces muy remotos debido a que le atribuían poderes espirituales o curativos.
El arqueólogo Andrew Fitzpatrick, de la firma Wessex Archaeology, apuntó, además, que el monumento estaba relativamente cerca de minas de estaño en la actual región inglesa de Cornualles, lo cual lo ubicaba en una zona comercial estratégica.
"EL CHICO DEL COLLAR AMBAR"
Jane Evans, jefa de arqueología del Centro Británico de Inspección Geológica (BGS, por sus siglas en inglés) le dijo a la BBC que los restos del joven -conocido por los arqueólogos como "el chico del collar de ámbar y quien tenía 14 ó 15 años de edad al morir- aparecieron en 2005, a unos 5 kilómetros al suroeste de Stonehenge.
"El lugar de su enterramiento, cerca de Stonehenge, y el collar que usaba indican que tenía in estatus alto", añadió.
El anális del esmalte dental permitió establecer que el joven procedía de un clima meridional.
Elementos químicos, como el estroncio o el oxígeno, presentes en el esmalte dental que se forma a edades tempranas son particularmente informativos para los arqueólogos, como explica el periodista Paul Rincon, de la BBC.
La mayor parte del oxígeno presente en la dentadura y los huesos procede del agua ingerida, que a su vez puede provenir de la lluvia o la nieve, agrega.
Y las proporciones de oxígeno y estroncio ofrecen a los científicos información sobre las condiciones climáticas prevalecientes durante la niñez de un individuo.
EL ARQUERO
Pruebas similares se realizaron hace unos años en otros restos de un individuo que vivió hace 4.300 años, conocido como el Arquero de Amesbury, y se determinó que provenía de un clima más frío que el inglés, probablemente de las estribaciones de los Alpes en las actuales Suiza o Alemania.
El arquero llegó en un momento en que la metalurgia se iba estableciendo en la actual Gran Bretaña; era un trabajador del metal, lo que le otorgaba una habilidad novedosa, según los expertos.
"Vemos el principio de la Edad de Bronce como un período de gran movilidad en Europa. La gente, las ideas, los objetos circulaban", agregó Andrew Fitzpatrick.
Pero "cuando el chico del collar de ámbar fue enterrado no se observaba una llegada de nuevas tecnologías (a Gran Bretaña) y tenemos que preguntarnos por qué grupos de gente (asumiendo que por su juventud el chico no se desplazaba solo) emprendían esos largos viajes".
Fitzpatrick especuló: "Es posible que fueran a Stonehenge porque era un lugar increíblemente famoso e importante, como hoy. Pero la respuesta no la sabemos".