De menos a más, ya se ha convertido en un equipo sólido. Sin brillar, pero con una fórmula y un trabajo que da resultados, la Baby Roja se mantiene invicta y la clasificación al Mundial de India está en sus manos.
Con el equipo colombiano ya se conocían. Habían empatado 1-1 en la fase grupal. A los 3' el arquero Bórquez mostraba nuevamente su seguridad, cuando se hizo con el balón tras una serie de rebotes en el área. Los colombianos con su capacidad física comenzaban a inquietar tibiamente a la zaga chilena, pero sin resultados. Los cafeteros presionaban y la Baby Roja intentaba salir y provocar situaciones de peligro a través del pelotazo. No es la forma más brillante ni la que satisface a los amantes del fútbol, pero curiosamente ha mantenido invicto al equipo.
En los 14' Chile avisaba a través de sus defensas. Un centro llovido de Oyanedel fue conectado por Zúñiga, quien con una volea pateada con la canilla provocó que el balón se estrellara en el travesaño. Una jugada preparada que denota el trabajo en el equipo.
Comenzaban los mejores momentos de los rojos en Rancagua. A los 19' llegó el gol de Zúñiga, quien se anticipó al arquero que se quedó en su posición, demostrando ser la gran debilidad de la escuadra cafetera. El juego aéreo nuevamente aventajaba a Chile en el marcador. Mérito de Caputto.
Los colombianos se desesperaban. No podían conectar y llegar con claridad al arco. La defensa chilena anuló todo indicio de ataque. Cerró los espacios y fue férrea en la marca. Alarcón y Valencia se transformaban en guerreros que asfixiaban a Martínez, Wandurraga y Barrero, quienes ante esta situación se enredaron en la mayoría de las ocasiones en que se acercaban al arco.
De ahí hacia el ataque, la selección con su seguridad se despojaba del pelotazo y se convertía en un equipo más corto. El volante de Audax Italiano, Oliver Rojas, lograba la conexión con los delanteros. Especialmente con Antonio Díaz, que era el pulmón de la escuadra. El partido tenía la intensidad que se preveía.
En el segundo tiempo Colombia sostenía un estilo que era anulado por la defensa nacional. A los 48' Peñaloza remató de zurda desde media distancia, pero el débil remate se fue. A los 53' fue Garavito quien probó, pero su tiro se fue muy elevado. Era un síntoma. Los cafeteros no se encontraban y la única forma de provocar daño parecía ser desde media distancia.
Colombia había adelantado sus líneas y generaba angustia en El Teniente. La Baby Roja comenzaba a perder la pelota y la construcción del contragolpe era esquiva para la zaga. El equipo comenzaba a ahogarse en su campo.
Los dirigidos por Restrepo tomaban el protagonismo y Chile aguantaba el resultado a la 'uruguaya'. El estilo defensivo nuevamente asegura al equipo y deja a India a la vuelta de la esquina.