Tras sufrir un accidente en moto, el italiano Fabiano Antoniani, conocido como DJ Fabo, quedó tetrapléjico y ciego.
El episodio ocurrió en 2014 y unos meses después comenzó su lucha para decidir sobre su muerte, ya que la eutanasia (acción u omisión que acelera la muerte de un paciente desahuciado con la intención de evitar sufrimientos) y el suicidio asistido (cuando se le proporciona a una persona, de forma intencionada y con conocimiento, los medios necesarios para suicidarse) están prohibidas en el país.
Acudió al Partido Radical con quienes comenzó una campaña para terminar con su vida legalmente.
Luego, mandó un mensaje al Presidente Sergio Martella para que interviniese, pero como no logró nada, pidió a Marco Cappato, dirigente del Partido Radical, que lo acompañara a Suiza para acceder al suicidio asistido.
Esto último, luego que el parlamento italiano pospusiera nuevamente, en menos de dos meses, el estudio del proyecto que establece que cualquier mayor de edad puede rechazar un tratamiento médico e incluso la nutrición y la hidratación ante una discapacidad, lo que abría la puerta a la legislación en esta materia.
Días atrás, DJ Fabo decidió cruzar hasta Zúrich, Suiza, para ingresar a una clínica que lo ayudó a morir.
Así lo aseguró Cappato quien además de relatar cada momento de este proceso a través de Twitter, se autodenunció a la policía luego de acompañar a DJ Fabo. "Fabo ha muerto a las 11.40. Ha elegido marcharse respetando las reglas de un país que no es el suyo", escribió en su Twitter.
https://twitter.com/marcocappato/status/836165351369031680
La Ley contempla entre cinco y doce años de reclusión a quien "determine o refuerce el propósito de suicidio de terceras personas o agilice de cualquier modo su ejecución", riesgo que hoy corre el político del Partido Radical.
https://www.youtube.com/watch?v=NA3QZBkC4UA