Suiza tenía más que claro que sacar un punto ante Francia les bastaba para clasificar a los octavos de final de la Eurocopa. Y a eso apostó. Al menos durante el primer tiempo. Desde que el duelo comenzó, el equipo de Vladimir Petkovic se dedicó a controlar el balón y aguantar los avances del local, que, aunque su cupo para la siguiente fase lo había asegurado en la fecha anterior, buscaba incesantemente el triunfo para terminar el grupo A con campaña perfecta.
Con Paul Pogba como el jugador más peligroso de la primera fracción, quien tuvo tres ocasiones de anotar la apertura de la cuenta, los suizos mantuvieron el arco de Yann Sommer en cero y lograron irse al descanso sin que su rival marcara la diferencia. El plan salía a la perfección.
Para el complemento, e insospechadamente, los de Petkovic salieron a la cancha con un planteamiento mucho más ofensivo, tratando que el adversario no tuviera la pelota, pero sin profundidad. Francia, por su parte, llegaba con más claridad, sin obtener buenos resultados en el tiro final, debido, en parte, a la buena actuación del portero suizo. Dimitri Payet tuvo la ocasión de anotar con una volea dentro del área, sin embargo, el travesaño evitó el gol (75').
A diferencia de los dos partidos anteriores, ante Rumania y Albania, la escuadra de Didier Deschamps no logró sentenciar el duelo en los minutos finales y debió conformarse con la igualdad. Un pobre espectáculo para despedirse de la fase de grupos del torneo continental.
Aun así, el empate sirvió para que ambos equipos estén instalados en la siguiente ronda. Francia acumuló siete puntos, quedó puntero y mantiene el invicto, mientras que los suizos sumaron cinco unidades. En el otro pleito, Albania venció a Rumania por la cuenta mínima y quedó en tercer lugar, teniendo una pequeña esperanza de avanzar como mejor tercero.