La British American Tobacco Chile solicitó a la Contraloría General de la República que se pronuncie para aclarar la manera en que se debe medir la distancia que puede haber entre los establecimientos educacionales y los locales de venta de tabaco.
Según confirmó el ministro de Salud, Jaime Mañalich, a La Tercera el viernes, el Minsal respondió al órgano contralor con argumentos que buscan que la actual Ley Antitabaco (que comenzó a regir el 1 de marzo) sea interpretada al pie de la letra.
"Esta ley es muy estricta ahora, porque aleja las posibilidades de venta de tabaco mucho más, generando un perímetro de seguridad de 100 metros desde todos los accesos al colegio. Las tabacaleras insisten en que la interpretación correcta es que los locales pueden estar a 100 metros del punto de entrada del establecimiento", explicó el secretario de Estado.
Desde la industria reconocieron que se hizo la consulta a la Contraloría y señalaron que no emitirán declaraciones hasta que la entidad se pronuncie. Sólo informaron que basaron su escrito en una resolución anterior del organismo, que en 2007 se pronunció sobre un instructivo de la Subsecretaría de Salud Pública. Este documento del 2007 establecía que para calcular dónde se podía vender tabaco, "la distancia se medirá desde el punto medio de cada puerta de acceso al establecimiento, se incluyen todas las puertas, estén o no destinadas al ingreso de estudiantes".
A juicio de la Contraloría, esa instrucción no se ajustaba a derecho, por lo que en esa oportunidad no se pudo aplicar esa norma. Sin embargo, la disposición de los locales de venta ahora está incluida en la ley, lo que según el planteamiento del ministro no debería dar lugar a interpretaciones. Lo mismo cree el diputado Juan Luis Castro (PS): "Ahora hay ley y no hay excusa para que se busque darle interpretaciones oblicuas, por lo tanto ni la Contraloría puede dejarlo pasar, ni el Ministerio de Salud que está a cargo de la supervisión".
Críticas
El ministro Mañalich afirmó que no le sorprenden las gestiones que están haciendo las tabacaleras, porque dijo que "donde la industria quiere poner el acento siempre" es en los menores de 12 a 14 años "antes de que lleguen a la edad adulta, porque una vez adicto, es un cliente para siempre". De hecho, según los datos del Ministerio de Salud, Chile ocupa el primer lugar en el ranking mundial de consumo de cigarrillos en adolescentes entre 13 y 15 años, llegando al 39,9% de ese grupo etario.
El presidente de la Comisión de Salud del Senado, Gonzalo Uriarte, señaló respecto a la presentación de British American Tobacco Chile ante el organismo de control que "aunque tienen todo el derecho a consultar lo que quieran, el espíritu de la ley es claro: alejar lo más posible de los colegios la venta de cigarros y cualquier intento por torcerle la voluntad al legislador se va a estrellar con la Contraloría o el Tribunal Constitucional o con el Poder Legislativo".
La ex subsecretaria de Salud y actual directora de la Fundación Chile Libre de Tabaco, Lidia Amarales, criticó la acción de la industria, y afirmó que "demuestran una vez más que no les interesa la vida de las personas; ellos siempre van a impugnar cualquier cosa que signifique disminuir las ventas".