La determinación de Nasa de unir a tres de sus telescopios espaciales, propone buscar galaxias que son hasta 100 veces más débiles que lo que individualmente, estos tres grandes observatorios, pueden llegar a ver.

Este procedimiento se realizará a través de un programa de colaboración llamado 'Campos Fronterizos', donde los astrónomos podrán realizar observaciones durante los próximos tres años de seis cúmulos de galaxias masivas.

Según explica John Grunsfeld, administrador asociado del Directorio de Misiones Científicas de la NASA en Washington, "cada observatorio podrá recoger imágenes utilizando diferentes longitudes de onda de la luz con el resultado de una comprensión mucho más profunda de la física subyacente" de estos objetos celestes.

Por su lado, Peter Capak, principal investigador de la misión Spitzer, cree que con esto lograrán "comprender cuándo y cómo se formaron las primeras estrellas y galaxias, creando el universo. En sí, cada observatorio nos entrega una pieza distinta para ese rompecabezas", asegura.

Los astrónomos han anticipado que estas observaciones revelarán poblaciones de galaxias que existieron cuando el universo tenía sólo unos pocos cientos de millones de años y que no han sido vistas antes.

FUENTE: Space