Ha sido el fenómeno del año: la teleserie Las mil y una noches promedia 23,7 puntos de rating desde su estreno, todos los días lidera el listado de los programas más vistos, contribuyendo a que Mega se llevara el primer lugar de la sintonía general durante mayo. Es por eso que durante la última feria de televisión realizada en la ciudad de Los Angeles en Estados Unidos, la mirada de los ejecutivos de los canales chilenos estuvo puesta en la industria de las teleseries turcas.
Y es Canal 13, el que en la búsqueda de sumarse al éxito de Mega, habría adquirido dos producciones, siendo una especialmente relevante, dado que es protagonizada por Halit Ergenç, el mismo actor que actualmente se roba las pantallas locales como Onur en Las mil y una noche. Se trata de Muhteem Yüzyl (Siglo Magnífico), la telenovela más ambiciosa en la historia de Turquía, con un costo de U$ 500 mil por capítulo que está basada en la vida del sultán Süleyman El Magnífico, que rigió el Imperio Otomano de 1520 a 1566.
Si bien Mega tenía la prioridad para adquirir esta producción, optó por no hacerlo. Lo que resulta paradójico, ya que fue precisamente Canal 13 el que el año pasado no quiso comprar Las mil y una noches. Y como en ese período Mega había perdido frente a TVN la exitosa teleserie colombiana La ronca de oro, decidió apostar por la historia sobre Onur y Sherezade.
La señal de Luksic también habría llegado a un acuerdo para emitir Ak- Memnu (Amor prohibido), una de las 10 teleseries más vistas en Turquía, que fue emitida en 2008 y vendida a más de 46 países. La trama, basada en un clásico de la literatura turca del mismo nombre y que narra una trágica historia de amor de una pareja que es obligada a casarse por sus respectivas familias. En 2012, Telemundo realizó una versión de la teleserie, que no obtuvo los resultados esperados. Esta historia también fue rechazada por la estación de Bethia para suceder a Las mil y una noche, dado que se trataba de otro melodrama romántico.
Según coinciden fuentes al interior de la industria, "Chile es el único país latinoamericano donde una teleserie turca pegó con tanta fuerza, es un fenómeno extraño y que se da sólo acá". Lo que sí es muy dispar en las negociaciones que ambos canales hicieron con las distribuidoras es el precio que pagaron por las teleseries, que en jerga televisiva se denominan "latas", ya que se compra el producto completo. Las mismas fuentes detallan que Mega pagó alrededor de US$ 2 mil por cada capítulo de Las mil y una noche, cifra ampliamente superada por los cerca de US$ 18 mil que habría pagado Canal 13 por las suyas. Pero el negocio no sólo implica ese costo, también involucra uno aún mayor que es la traducción y doblaje de las teleseries, proceso que se está realizando en Chile; ambos canales ya entregaron sus teleseries a la Empresa Dint, especialistas en el doblaje. "En este caso, este proceso es más caro que comprar la lata, porque es difícil encontrar traductores del turco al español", señala un ejecutivo de la estación privada, que agrega que "además es una apuesta importante, porque no siempre se podrá repetir el éxito de Las mil y una noche que la hace tan rentable".
Por otra parte, la estación de Bethia ya decidió que va a seguir emitiendo teleseries turcas y está negociando la compra de otra producción que suceda a la actual. Se está evaluando dentro de las telenovelas más vistas de Turquía, entre ellas Gümus (Plata), Kurtlar Vadisi (El Valle de los Lobos) y Fatmagül'ün Suçu Ne?, siendo esta última -que en la traducción al español sería ¿Cuál es la de Fatmagul?- la que corre con ventaja sobre las otras, dada su potente historia que causó controversia. Cuenta la historia de una joven que es violada por un grupo de borrachos y obligada a casarse con uno de sus agresores. Una trama que cumple con el plan de Mega que es presentar algo diferente a Las mil y unas noche, que se espera esté en pantalla hasta septiembre, para de inmediato dar paso a su sucesora.