Finalmente las autoridades decidieron programar en Temuco la final de la Copa Chile que disputarán Universidad de Chile y Universidad Católica. El compromiso se jugará el 8 de mayo, a las 20 horas en el estadio Germán Becker.

La idea original de la ANFP era jugar en Santiago, ciudad de los equipos finalistas, pero tomó fuerza la opción de llevar el partido a regiones, lo que era bien visto en la UC y aceptado en Azul Azul. Aunque Darío Franco, DT de los azules, expresó hoy que lo lógico era jugar en la capital.

Se analizaron las opciones de Temuco, Coquimbo, Antofagasta e, incluso, Chillán, pero finalmente se impuso la primera.

En Santiago la alternativa era el Monumental.