Fueron dos años en los que la relación Claudio Bravo y Marc-André Ter Stegen, sobre todo en lo mediático, era uno problema en Barcelona. El chileno se acabó marchando al Manchester City, y el alemán quedó con la titularidad de los catalanes tanto en la Liga Española como en la Champions League.
"El hecho de jugar también la Liga te hace aprender cosas nuevas que son distintas cuando juegas en la Champions. También hay muchos partidos más, por lo que tienes más ritmo y aprendes, y sigues mejorando siempre. Esa era la situación que yo buscaba desde que llegué y ahora puedo decir que es así. Siempre que me llega el balón busco una solución buena y si el delantero está cerca, pues está cerca", dijo el ex Borussia Monchengladbach a Mundo Deportivo.
El ahora meta titular de los culés recordó que con Bravo "era una competencia muy dura porque cada uno quería jugar todo. Al final, tal y como ha ido todo desde el verano, la cosa ha cambiado y los dos estamos bien. Él juega con el Manchester y yo aquí en el Barça. Tenía que haber un cambio porque no era fácil mantener aquella situación".
Ter Stegen también fue sondeado por el Manchester City, ya que era otro portero del gusto de Guardiola: "Imagino que querría un portero que juegue con los pies, todo el mundo conoce a Guardiola como persona y como futbolista y su idea de juego es así. Estaba claro que si no cambiaba la situación había que buscar una solución pero el club me dijo que había llegado mi momento y que todo el mundo me apoyaba, y por eso no dudé y me quedé aquí", recordó.