Treinta y tres millones de viajes con tarifa rebajada en Metro realizaron los adultos mayores en 2016, según el último balance de la firma estatal. Una modalidad que representa el 4% de las 672 millones de transacciones que registró el tren subterráneo el año pasado. De allí que sorprendiera la decisión del ministerio de Transportes de limitar la compra libre de pasajes a la tercera edad, medida que hoy fue revertida por la Presidenta Michelle Bachelet.

"Basada en los estudios correspondientes, he resuelto que, tanto los pensionados como jubilados que reciben actualmente el beneficio de rebaja tarifaria en el Metro, puedan realizar, sin restricción alguna, los viajes que requieran diaria, semanal o mensualmente", afirmó hoy Bachelet. De esta manera, quedó atrás el decreto que acotaba la adquisición de pasajes con descuento a sólo un máximo de dos por día (o 14 por semana). Hasta ahora, hay 180 mil inscritos que tienen esa rebaja en la compra de boletos -mujeres sobre 60 años y hombres de más de 65 años- quienes acreditaron su edad ante la estatal.

La semana pasada, una vez anunciada la restricción del beneficio, las agrupaciones de adultos mayores se reunieron con Metro y Transportes para expresar su rechazo. Gladys Fernández, presidente de la Corporación la Marcha de los bastones, valoró la decisión de la jefa de Estado y sostuvo que ahora su objetivo es que "esto rija de inmediato, porque es un ahorro para miles de personas con una pensión bastante baja". Añadió que los adultos mayores "no haremos mal uso de esta ayuda. Vemos que nuestros traslados son justificados por salud y trabajo". De hecho, las 180 mil personas que viajan con descuento sólo realizan 16 viajes por mes, según Metro. Pero, la dirigenta apuntó que con la apertura de la nueva Línea 6 "se utilizará mucho más este medio, por lo que cada día se sumarán más pasajeros".

Uno de los puntos que pesó en la decisión del Ejecutivo para que se diera luz verde a la venta libre, fue la actual discusión sobre la reforma al sistema de pensiones, que pretende aumentar los ingresos de los jubilados.

Potenciales beneficiarios

Paula Fortes, directora del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), dijo que la población mayor "enfrenta un escenario muy complejo a nivel financiero. Por ello, se está viendo una reforma al sistema de pensiones", el que se traducirá en un proyecto de ley que se enviaría este mes.

La alta funcionaria añadió que cuando se evalúan estas ayudas a la tercera edad se deben analizar antecedentes clave, como los datos que arroja la Encuesta Casen de 2015: en Santiago vive 1 millón 185 mil personas mayores de 60 años (de un total de tres millones a nivel nacional) y que, según el análisis, el 21% de ellos está en la categoría de la "pobreza multidimensional". Por eso, la directora del Senama añadió que la entrega de este tipo de ayudas "tiene como objetivo facilitar la movilidad a las personas, lo que lleva a que puedan salir, trabajar y sentirse mejor. En el fondo, se invierte en su salud".

Nueva demanda

El anuncio de la Presidenta generó una nueva demanda destinada a la tercera edad, apoyada por los parlamentarios.

El diputado Giorgio Jackson (RD) sostuvo que se debe aplicar un subsidio para a la tarifa que pagan en los buses del Transantiago, similar a la que cancelan los estudiantes (también $ 210). "La rebaja que existe hoy solo es válida para los adultos mayores que viven cerca del Metro, pero la demanda es que haya una tarjeta que integre al Transantiago", dijo.

El diputado de la comisión de Familia, Ramón Farías, afirmó que se debe extender esta ayuda al sistema de superficie, pues "así pueden utilizar dos medios de transporte diferentes por un precio menor. Esto es muy necesario porque tienen que utilizar una mayor cantidad de atenciones de salud, con una pensión bastante baja". Agregó que también debe existir esta rebaja "en las tarifas que se pagan en otras regiones, pues hasta ahora ello depende de la voluntad de las empresas o de una política puntual. Todos los jubilados deben tener un trato igualitario".