A comienzos de marzo de 2012, un artículo breve en la edición local de noticias del sitio Ouest France daba a conocer cómo el poblado de Gacé, en el noroeste de Francia, sacudía su calma habitual con el inicio de las filmaciones de Malavita. Un proyecto que, encabezado por Luc Besson, les permitía a los habitantes del lugar conocer de cerca a estrellas como Robert de Niro, Michelle Pfeiffer y Tommy Lee Jones, además de la inconfundible personalidad del realizador Martin Scorsese, quien aceptó ser el productor ejecutivo de la cinta para asesorar a Besson en el guión y varias de sus tomas, tanto en Francia como en Estados Unidos.

Así, no sólo un pedazo de Hollywood se apoderaba de un rincón del campo francés, sino que también una de las parejas emblemáticas de su cine, De Niro y Scorsese, volvía a unir sus nombres en un largometraje, tras su última colaboración en Casino (1995), y en una trama con un eje conocido: la mafia.

The family -como fue rebautizada la cinta- toma como base una novela de Tonino Benecquista para mostrar la historia de Giovanni Manzoni, un mafioso neoyorquino que, después de caer en desgracia ante sus pares, acepta que el Programa de Protección a Testigos, encarnado en el agente Tom Quintiliani (Tommy Lee Jones), lo reubique en Europa, junto a sus hijos, Belle y Warren (Dianna Agron y John D'Leo), y su esposa Maggie (Pfeiffer).

Viejos hábitos

Una aventura que lleva a los Manzoni a un pueblo en Normandia, donde serán conocidos bajo el apellido Black, pero no podrán dejar atrás su explosivo carácter y malas costumbres. De esta forma, Giovanni, alías Fred, no duda en mandar al plomero al hospital cuando no le gusta un arreglo de la casa, o Maggie fabrica una bomba casera para vengarse de una vecina. "Ella tiene algunos problemas al tratar de romper con los viejos hábitos", fue como resumió Pfeiffer a USA Today el "explosivo" papel que le permitió reencontrarse con De Niro, después de compartir pantalla en Stardust: polvo de estrellas (2007), y con la "cosa nostra", a 25 años de Casada con la mafia (1988).

"Tonino (Benecquista) me dijo que sería perfecto si Robert de Niro y Michelle Pfeiffer interpretaran los roles protagónicos", contó Besson a Movie Talk, recordando los días de preproducción de la comedia negra que debuta en salas estadounidenses el 20 de septiembre. Días en que se reunía con el autor de la novela para desarrollar sus personajes y en los que no cabía en sí cuando, poco después, obtuvo la confirmación de que los actores estarían en su filme. Una sensación similar a la que tuvo hace un par de meses, cuando pudo ver una copia de The family con Scorsese y este último se rió durante toda la proyección. "Fue como tener una aprobación a tu trabajo desde el cielo, del mismo Dios", afirmó Besson.