El lunes 9 de septiembre, a las 18.20 horas, la banda norteamericana The Offspring arribó a nuestro país. Era la segunda vez que pisaban suelo chileno. La primera, en 1997, de la cual aún tienen recuerdos.
"Ese fue nuestro primer show en Sudamérica", recuerda inmediatamente Noodles, guitarrista de la banda. "Recuerdo que era un bello país. Recuerdo haber salido y comer muy rico y a un loco y apasionado público. Creo que ahora está aún más loco", señala junto al vocalista de la banda, Dexter Holland, a pocos minutos de subir al escenario del Teatro Caupolicán.
Su impresión no es por nada: las 5 mil personas que repletan el recinto corean a gritos al show previo en manos de los chilenos de Los Mox. "Pareciera que están fuera de sí", señala en medio del ruido.
"En aquella época (…) éramos una banda que estábamos intentando encontrarnos a nosotros mismos", continúa. Por esa fecha, sin embargo, ya ostentaban un éxito importante, entre ellos, el que llegó con el disco Smash (1994). "Amamos tanto Smash como el resto de los nuevos discos", aclara el guitarrista, analizando además la carrera que los llevó hasta su más reciente material: Days Go By (2012). "En realidad, estamos siempre más entusiasmados con la grabación más nueva", coinciden los músicos que ya bordean los 50 años de edad.
"Nosotros no hacemos música pensando en qué es lo que tenemos que darles a nuestros fans. Nos metemos en la composición y partimos desde las canciones que nos gustan", argumenta. "Si tratásemos de complacer a nuestros fans, creo que caeríamos bajo, porque creo que primero tienes que amar la música en sí, de otro modo, no tiene sentido hacer música".
EL CONTEXTO DEL REGRESO
"No soy muy culto en historia, pero se un poco de Allende y sobre Pinochet", señala el músico inmediatamente al reparar en la fecha que enmarca su regreso al país. "Chile estuvo bajo dictadura desde el 73. ¿Si la dictadura es mala? Por supuesto! Es genial que Chile sea un país libre. Es un país muy bonito", señala antes de aclarar: "No somos una banda con una postura política que trata de mandar mensajes a la gente. Si hay algo que sentimos que tenemos que decir, simplemente lo hacemos".
La intervención militar en Siria por parte del gobierno de Estados Unidos, sin embargo, es un tema del que sí expresan su postura. "Se trata de una decisión difícil", señala Noodles. "Creo que sería una muy mala idea por parte de los Estados Unidos meterse en otro país más. Sólo digo: no lo hagan", interviene su compañero, Dexter Holland.
"Yo preferiría ver cómo apresan a los dictadores antes de tratar de crear mártires en un bando y otro. Pero tienes que tener la evidencia", continúa el guitarrista y agrega: "El problema de las armas es que siempre va a dañar a las personas comunes y corrientes y no a los que están a cargo de las decisiones".
DESMANES
Pasadas las 21.30 horas, subió al escenario Dexter Holland y su grupo, que sin esperar más, comenzó a interpretar All I want, el primes single del disco Ixnay On The Hombre (1997).
Sin embargo, minutos antes del inicio, un grupo de seguidores decidieron ingresar a la fuerza al recinto capitalino, donde unas 50 personas ingresaron a la fuerza, causando la molestia del staff que acompañaba a la banda.
El incidente, sin embargo, fue controlado por Carabineros, quienes resguardaban la seguridad del evento. Sin embargo, la autoridad policial continuó con el control horas más tarde, cuando comprobó una sobreventa de entradas: de 4 mil declaradas por la productora Transistor a unas 5 mil 600 que finalmente fueron cortadas en la entrada.
El problema, sin embargo, aún se encuentra en investigación.
La banda dejó el país durante este miércoles, alistándose para su próximo show en Brasil el 14 y 15 de septiembre.