En el fútbol suele ser fácil recibir elogios de los compañeros, pero cuando las loas provienen de los rivales, el mérito es indudable, como ocurre con Radamel Falcao García (Santa Marta, Colombia, 1990). Aquel delantero centro que fue considerado por muchos como el mejor 9 del mundo durante su paso brillante por el Atlético de Madrid, entre 2011 y 2013, cayó en el ostracismo por las lesiones y la falta de ritmo, pero hoy ha recuperado la mordida que le hizo famoso. "Falcao volvió muy fuerte, es un veneno", dijo recientemente el técnico del Niza, Lucian Favre, quien en un partido clave por el liderato de la Ligue 1 francesa comprobó el buen estado del ariete colombiano, quien firmó un doblete en el triunfo del Monaco por 3-0. El sábado hizo otro contra el Metz.
El Tigre vive días felices en el Principado, donde se ha convertido en el capitán, líder dentro y fuera de la cancha. Benjamin Mendy, uno de sus compañeros, lo deja claro: "Tan pronto como llegó, sentí que era un gran personaje. Es muy humilde y está lleno de respeto. Siendo la persona que es, podría sentirse mejor que todos nosotros, pero no es así", comenta el defensa francés; "todo el mundo en el plantel ama a Falcao por eso. Él es uno más de la plantilla, habla con todos sin distinción. Aquí nadie dudó de su trabajo".
Pero la importancia del renacido Falcao, de 31 años desde el pasado viernes, no se limita a la ascendencia. Todo lo contrario. Su mayor impacto ha estado en el verde césped, donde ha vuelto a exhibir sus garras. En lo que va de la temporada 2016-2017, en 27 partidos ha marcado 22 tantos: 16 en Liga, 4 en Champions, uno en Copa de Francia y uno en la Copa de la Liga.
Confianza recuperada
Un paisano de Falcao que sabe del oficio de hacer goles es Faustino Asprilla, quien aplaude el regreso del atacante samario: "Todos sabemos qué clase de delantero es Falcao. A un jugador de esa raza y calidad no se le había olvidado cómo se juega al fútbol ni cómo se hacen los goles. Lo que pasa es que necesitaba confianza después de tanto tiempo lesionado y parado. Lleva un año tranquilo en el Monaco y estamos viendo al Falcao que todos conocemos".
Radamel necesitaba tranquilidad. Y también confianza, ésa que no tuvo en su paso por Inglaterra, donde no se encontró ni en Manchester United ni en Chelsea. En dos temporadas, entre 2014 y 2016, apenas hizo cinco goles en 41 encuentros. Atrás ha quedado aquella infausta rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, en enero de 2014, en un intrascendente Monaco-Chasselay por la Copa de Francia, que le impidió ir al Mundial de Brasil.
Los goles de Falcao han sido echados de menos en Colombia, donde hasta uno de los referentes históricos, como Carlos Valderrama, le da su bendición: "No tengo dudas de que si Falcao está bien, es uno de los mejores delanteros del mundo. Si no el mejor. Hace un tiempo dije que a Falcao le tocaba esperar en la selección, pero hoy en día recuperó su nivel. Se esforzó por estar bien física y anímicamente. Yo siempre le he tenido fe. En Colombia no hay otro delantero con esas características".
Falcao tampoco tiene sustituto en el Monaco, donde en su segundo ciclo es el máximo goleador, con 16 tantos, del líder de la Ligue 1. En Europa, ha llevado al club a los octavos de final de la Liga de Campeones, en los cuales se enfrentará al Manchester City de Claudio Bravo la semana que viene. En el Viejo Continente es conocido el olfato goleador del 9 colombiano, ya que es el delantero más efectivo de la historias de las competiciones continentales, con 42 goles en 47 partidos en su carrera con Porto, Atlético de Madrid y Monaco, con el mejor promedio anotador: 0,89.
El ex goleador Víctor Hugo Aristizábal, quien es el único colombiano que ha hecho más goles (348) que Falcao (255) en la historia, cree que al oriundo de Santa Marta, quien esta semana celebró un decenio con la camiseta de su país, le ha llegado el momento de recuperar su lugar: "A Falcao había que dejarle que se recuperara bien. Ahora que está al cien por cien y tiene confianza va a aportar toda su calidad. Él siempre va a ser de la Selección, por su importancia. Tenemos que valorar el goleador que tenemos".
El último fin de semana, Falcao firmó el 37º doblete de su carrera en la goleada sobre Metz (5-0) y continuó su fiesta particular. Ya es seguro. El Tigre está de vuelta.