Tilda Swinton ha pasado los últimos días llevando a rastras una sala de cine por las altas tierras de Escocia.
La actriz ganadora de un Oscar está transportando un camión cinematográfico por distintas ciudades y pueblos para un festival de cine rodante. La mayor parte del tiempo conducen ellos mismos, aunque voluntarios tiran del camión de 40 toneladas parte del trayecto, a pie.
Swinton dijo que la iniciativa, un homenaje a las películas y paisajes de su Escocia natal, era una "idea loca" que parecía apropiada.
En una entrevista con el diario The Guardian, publicada hoy, la actriz explicó que el público en comunidades remotas estaba hambriento de cintas no comerciales y de una "experiencia cinematográfica" no disponible en DVD.
El programa del festival internacional incluye filmes sobre viajes, desde el clásico Los viajes de Sullivan, de Preston Sturges, hasta Cold Fever, de Fridrik Thor Fridriksson.
El drama de guerra Culloden se exhibió en el poblado donde se llevó a cabo la batalla del siglo XVIII, y una adaptación de la película japonesa de Akira Kurosawa Trono de sangre se proyectó en Cawdor, lugar relacionado con la obra de Shakespeare.
El evento sigue a un festival de cine que Swinton ayudó a organizar el año pasado en su poblado de Nairn, en la costa oriental de Escocia. El recorrido de seis días, apodado Un peregrinaje, termina el jueves en Nairn. Las cintas participantes volverán a exhibirse el fin de semana.
Swinton, de 48 años, ganó el Oscar a la mejor actriz de reparto en el 2008 por su trabajo en Michael Clayton.