En Chile es conocida por sus roles en el cine. Fue la madre en Sexto Sentido, la sufrida hermana de Cameron Diaz en En sus zapatos, la mujer que soñaba con casarse en La boda de Muriel y nuevamente la mamá en la disfuncional familia de Pequeña Miss Sunshine.

Pero lo que tiene a Toni Collette (36) dando que hablar por estos días es el  flamante premio Emmy que ganó el domingo pasado, a  mejor actriz de comedia, por la serie United states of Tara (que en Chile se ve desde este martes por Fox), donde interpreta a una madre de familia con múltiples personalidades.

Al otro lado del teléfono, desde EEUU, en todo momento suena relajada y risueña, bromea con que le gustaría haber venido a Latinoamérica y habla del éxito de su comedia y de los desafíos de la serie en que participa, que tiene a Steven Spielberg como uno de los productores. Collette cuenta que antes de tomar el papel de Tara "no estaba buscando trabajar en la TV. Pero mi agente me llamó y me dijo que, aunque no era lo que estaba buscando, quería que viera este rol. Me envió el libreto y nunca había leído nada como esto, supe inmediatamente que tenía que tomar el papel. Me pasó igual como en el cine, donde los roles casi te escogen a ti, hay un instinto", recuerda.

Y agrega que la razón por la que tantas actrices cinematográficas están encontrando refugio en la pantalla chica es por la calidad de la escritura y porque "hay maravillosos papeles para mujeres", cosa que, se han quejado varias, por estos días escasean en el cine.
Pero la actriz se toma las cosas con calma.

"Lo mejor del premio es que le dará una vida más larga al show, y ojalá que amplíe nuestra audiencia. Es grandioso que el programa sea reconocido de cualquier manera, porque nos esforzamos mucho", apunta. Y aclara que "en términos de mi carrrera, no tengo idea si la va a afectar".

Aunque United states of Tara se exhibió con éxito en EE.UU., Collette dice que la serie tampoco cambió mucho sus circunstancias, más allá de que es mucho trabajo: "Me dio una estabilidad que antes no tenía. Pero es divertido, porque cuando la estaban dando en EE.UU., yo estaba en Australia, y ahora que la están dando en Australia, estoy aquí. Así que en realidad no sé qué efecto ha tenido", lanza entre risas.

Sobre su interpretación,  afirma que "no hay técnica". "Al principio me abrumé al pensar cómo la iba a interpretar, y me pareció una tarea intimidante. Creo que me ayudó que el rol tuviera cambios físicos. Y traté de que todas las personalidades fueran lo más reales y distintas entre sí", acota.