El alemán Tony Martin (Omega Pharma), triple campeón del mundo de contrarreloj, se adjudicó en solitario la 9ª etapa del Tour de Francia este domingo en Mulhouse, donde el francés Tony Gallopin se ha puesto líder de la general.
Gallopin le arrebató el maillot amarillo al italiano Vicenzo Nibali tras cruzar la meta 2 minutos y 44 segundos más tarde que Martin, junto a otros 19 ciclistas.
Tras una jornada de más de 150 kilómetros, Martin es el tercer alemán en adjudicarse una etapa en este Tour, tras las victorias de Marcel Keittel (tres triunfos) y de Andre Greipel.
Los favoritos de la carrera, principalmente Nibali y el español Alberto Contador, se han mantenido a la expectativa en esta segunda jornada por los Vosgos y justo antes de la dura etapa del lunes con final en alto en Planche de Belles Filles.
Con limitaciones cuanto más alto sube la carretera, Martin se defiende en la media montaña, como el Gran Ballon (1336 m).
Esta vez, llegó a la última cima del día, situada a 43 km de la meta, con tres minutos de ventaja sobre el grupo perseguidor y pudo mantener la distancia para dar al Omega Pharma su segunda victoria parcial de este año, después del que el italiano Matteo Trentin se impusiera el viernes en Nancy.
Tras él, Gallopin lanzó a sus compañeros en el descenso hacia los llanos de Alsacia. Tuvo la colaboración en esta parte final de otros corredores interesados en alejar lo más posible al pelotón.
En esa tarea se aplicaron los franceses Cyril Gautier (14º en la general), Pierre Rolland (8º) y el portugués Tiago Machado (3º), poco antes de que el suizo Fabian Cancellara se lanzara a por la segunda posición del día.
En la clasificación general, Gallopin consiguió más de un minuto y medio de ventaja sobre Nibali antes de la etapa más dura de los Vosgos.