La fuerza de Isaac, que ayer pasó de huracán a tempestad tropical, se está debilitando y esta noche puede convertirse en "depresión tropical", informaron hoy expertos del Centro Nacional de Huracanes de Miami.

Isaac pasó en las últimas horas por la costa estadounidense del Golfo, provocando graves daños. Sin embargo, no alcanzó la fuerza destructiva que tuvo Katrina en agosto de 2005, que causó al menos 1.800 muertos en Nueva Orleans.

"Isaac continúa produciendo fuertes lluvias y mal tiempo, mientras se está moviendo hacia las zonas internas de Louisiana", aseguraron los expertos.  Y agregaron que "el nivel de agua sigue alto a lo largo de la costa septentrional del Golfo", detalla Ansa.

Una vez que deje atrás el estado de Louisiana, la tempestad seguirá hacia el sur de Arkansas, con vientos que alcanzarán los 85 kilómetros por hora.

DIQUES
El alcalde de Nueva Orleans, Mitch Landrieu, dijo que el sistema de 14.500 millones de dólares construido para la ciudad por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército -un conjunto de
muros, diques, compuertas y bombas- había funcionado "exactamente como debía".

Y los indicios iniciales parecen apuntar a que los daños a la propiedad causados por Isaac no llegarán a la lista de los 10 peores huracanes de Estados Unidos en pérdidas ajustadas a la inflación.

Pero la tormenta todavía produce grandes dolores de cabeza, especialmente por la lluvia aparentemente interminable que tomó por sorpresa a muchos residentes, atrapando a algunos en los techos y causando importantes inundaciones en zonas bajas costeras. Más de 730.000 residentes de Louisiana y Mississippi todavía estaban sin electricidad, consignó Reuters.