Intensas lluvias y violentas ráfagas de viento desencadenados por la tormenta tropical Lee dejaron sin suministro eléctrico a miles de personas en el sur de Louisiana y Mississippi y obligaron a evacuar pueblos próximos a los pantanos, donde el agua llegó a las puertas de varias casas.
La tormenta estuvo prácticamente detenida frente a la costa por horas, antes de reanudar su lento avance por la tarde. Se espera que toque tierra más tarde, y que deje caer más de 30 centímetros de lluvia en el norte de las costas del Golfo de México y en el sureste de Estados Unidos en los próximos días. No se reportaron heridos y sólo hubo informes aislados de que el agua había llegado a viviendas y comercios en zonas bajas.
El centro de la tormenta se encuentra a 90 kilómetros al sudoeste de Morgan City, Louisiana, y desata latigazos intermitentes de viento y lluvia. Avanza al noroeste, a unos seis kilómetros por hora.
Sus vientos máximos sostenidos cayeron a los 75 kilómetros por hora, y se espera que la intensidad decrezca aún más para el domingo. Las advertencias de tormenta tropical van de los límites entre Louisiana y Texas hasta la Destin, Florida.
La compañía de electricidad Entergy reportó que más de 37.000 clientes se habían quedado sin suministro el sábado por la mañana pero la cifra descendió a 18.000 por la tarde. Cleco Corp., otra empresa grande, reportó 3.500 apagones.
En Nueva Orleáns, las precipitaciones esporádicas causaron algunas inundaciones en zonas bajas el sábado temprano, pero las bombas estaban succionando el agua para enviarla al lago Pontchartrain.
Se anticipa que la tormenta seguirá un trayecto errático hacia el norte hasta el domingo cuando enfrentará un frente frío y virará al nordeste.