El australiano Michael Rogers (Tinkoff), un veterano contrarrelojista con tres títulos mundiales, irrumpió una con victoria en el estreno de los Pirineos en el Tour de Francia, en una jornada en la que hubo batalla por el podio, con Alejandro Valverde reforzado en su segunda plaza y Vincenzo Nibali como sólido líder.
Después del triunfo del polaco Majka en los Alpes, Rogers llevó de nuevo la fiesta a la casa del Tinkoff de Alberto Contador, quien vio desde su casa de Lugano cómo la máquina australiana se imponía con un ataque a cuatro kilómetros de la meta que le llevó en solitario hasta el triunfo.
Y también hubo algo que celebrar en el Movistar y Francaise, ya que tanto Valverde como Pinot metieron 1'50'' minutos a Romain Bardet, desalojado a la quinta plaza de la general, y 3'30'' al estadounidense Van Garderen, un peligro menos para la crono del sábado.
Pero fue una jornada tranquila para el líder Nibali, espectador de excepción, silencioso, de un desenlace espectacular de la jornada más larga del Tour con 237 kilómetros entre Carcasona y Bagneres de Luchon.
La jornada también recordó al italiano Fabio Casartelli, fallecido en el descenso del Aspet en 1995.