La policía del estado de Connecticut centró hoy sus investigaciones sobre un trabajador de laboratorio sospechoso del asesinato de una estudiante de la Universidad de Yale pocos días antes de que contrajera matrimonio.

Annie Marie Le, de 24 años, desapareció el martes de la semana pasada y su cuerpo fue encontrado el domingo, el mismo día en que tenía previsto casarse con Jonathan Widawsky, un estudiante de postgrado de la Universidad de Columbia.

Fuentes policiales de la ciudad de New Haven, donde se encuentra localizada la universidad, dijeron que el técnico de laboratorio trabaja en el mismo edificio donde fue encontrado el cuerpo de Le.

Añadieron que hasta el momento no se ha hecho ningún arresto, pero el hombre es la única persona sobre la cual se han centrado las sospechas.

Hasta ahora la policía ha entrevistado a más de 100 personas que tuvieron acceso al edificio el domingo pasado, pero ninguna ha sido acusada, manifestaron.

"Estamos conversando con todos los que tuvieron acceso a esa parte del edificio. Queremos estar seguros de nos estamos concentrando en la persona correcta", dijo el jefe de policía James Lewis, al diario New Haven Register.

El hombre atrajo la atención de la policía al descubrirse que había sufrido rasguños recientes en el pecho, aun cuando estaba bajo observación desde el momento mismo en que fue hallado el cuerpo de la estudiante.

El decano de la universidad, Richard Levin, trató de reconfortar a la comunidad estudiantil y académica durante una reunión realizada el lunes por la noche en el Salón Sterling de la Facultad de Medicina.

Personas que asistieron a la reunión a la cual no tuvo acceso la prensa señalaron que Levin manifestó que las cámaras de seguridad siguieron cada paso de la muchacha antes de entrar al edificio en el que murió.

Añadió que no tiene dudas de que el homicida será finalmente arrestado y que para ello la policía cuenta con pruebas de ADN.

Sin embargo, algunos estudiantes han señalado que han perdido la confianza en las medidas de seguridad.

"Pensar que haya alguien relacionado con estos edificios que nos pudiera hacer daño hace difícil que tengamos confianza", manifestó Tricia Lobo, estudiante de ingeniería biomédica.

Muneeb Sultán, otro estudiante de la universidad, indicó que "es aterradora la idea de que haya un asesino caminando por los predios del campus".

"No puedo creer que haya ocurrido en un edificio de Yale al que solo se podía ingresar mediante una llave codificada", añadió.

El cadáver de la estudiante fue hallado detrás de una pared, entre tuberías y cables, en el sótano de unos laboratorios de biología molecular de la universidad.

Según Robert Alpern, decano de la Escuela de Medicina de Yale, en declaraciones al diario universitario Yale Daily News, el acceso al sótano era limitado y sólo personas con una tarjeta codificado podían ingresar a él.

"Sin duda sería extremadamente difícil que alguien que no fuera de Yale pudiera entrar...no imposible, pero extremadamente difícil", indicó.

Pese a las seguridades de que el asesino será finalmente identificado algunos estudiantes recordaron el de la universitaria Suzanne Jovin, de 21 años.

La estudiante fue atacada en la intersección de dos caminos cercanos al campus. Recibió 17 puñaladas en el cuello y en la espalda. El caso no ha sido resuelto.

Paralelamente, la oficina del forense de la ciudad anunció hoy que no se darían a conocer los detalles de la autopsia "para facilitar la investigación", según dijo una portavoz oficial.

No obstante, las autoridades dijeron hoy que efectivamente el cadáver descubierto el domingo detrás de una pared es el de Anne Marie y que su muerte fue resultado de un homicidio.

La desaparición y muerte de la atractiva estudiante de origen asiático causó conmoción en todo el país y centenares de estudiantes se congregaron el lunes por la noche en una vigilia con velas encendidas frente a la universidad.

Joe Avery, portavoz de la policía de New Haven, indicó el lunes que el autor del asesinato parece haber tenido un motivo para cometer el crimen y que no se trató de un hecho aleatorio.