Las principales ciudades de España amanecieron este miércoles con carteles de paro en sus calles, por la segunda huelga general que el país vive en menos de un año, a causa de la crisis económica.
Esta huelga general de 24 horas fue convocada por los distintos sindicatos, en rechazo por las medidas de austeridad, desempleo y precariedad.
Durante la noche, en Barcelona un grupo de trabajadores quemó neumáticos en los accesos al mercado de abasto, el Mercabarna, mientras que en Madrid centenares de jóvenes se manifestaron, bloqueando la circulación y obligando a cerrar las puertas de los negocios.
Hasta esta mañana, alrededor de 57 personas han sido detenidas, por incidentes menores, en los que una decena de personas han resultado heridas.
Según cifras del sindicato UGT, durante las primeras horas de la mañana la adhesión al paro ha sido masiva, y se estima que "en la mayoría de los sectores" la huelga alcanza al 85%.
En "los grandes mercados y la industria, no se han producido alteraciones relevantes", afirmó el ministerio del Interior, que agregó que el consumo de electricidad, que se suele utilizar como indicativo de la incidencia del par había caído tan solo un 11,4%.
"Estamos defendiendo en España en una movilización que coincide con varios países europeos, por la serie de recortes que está aplicando el gobierno de Mariano Rajoy y que afecta sobre todo al ámbito de lo publico", afirmó Juan Carlos Cáceres, un responsable sindical de CCOO, en la estación de Atocha.
Y es que Portugal también vive este miércoles una jornada de huelga general, mientras que manifestaciones y distintas acciones han sido anunciadas en países como Italia, Grecia, Alemania, Francia, Bélgica o Polonia.