Los trabajadores de la mina Spence, propiedad de la multinacional BHP Billiton, estarían dispuestos a volver a la mesa de conversaciones tras casi un mes de paralización, para lo cual se reunieron la mañana del miércoles con la directora nacional del Trabajo, Patricia Silva, y pidieron la intervención del gobierno para solucionar el conflicto, que actualmegte se encuentra en puntos muerto.
Según señaló a LaTercera.com el presidente del sindicato de Mina Spence, Andrés Ramírez, los trabajadores están dispuestos a negociar nuevamente con la empresa, aunque solicitan que el piso de la oferta sea el ofrecido el pasado 10 de octubre.
"Vinimos a plantear nuestra voluntad para tratar de llegar a un buen acuerdo con la compañía, a decirle que estamos dispuestos a reiniciar las mesas de conversaciones con ellos, pero también a denunciar la intransigencia de la empresa (...) estamos dispuestos seguir negociando a tratar estos temas y poder llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes. La empresa quiere llegar a un acuerdo pero solamente para beneficiarse ellos", dijo el dirigente sindical.
Ramírez acusó que BHP Billiton pretende "destruir" la organización sindical, y desmintió tajantemente que exista un quiebre entre los trabajadores. Asimismo, indicó que los puntos en que no han llegado a acuerdo con la empresa tiene que ver con los bonos y las ayudas para salud, educación y bonso de producción, en lo que aún no han llegado a acuerdo.
El dirigente señaló que el petitorio presentado por los trabajadores -que incluye un reajuste real del 5% en sus sueldos base- y el bono de término de conflicto ofrecido por la empresa -unos $8,5 millones más un préstamo blando de $2 millones- representan menos de 1% de las utilidades anuales de la firma, con un costo estimado de US$2,5 millones por año hasta el 2012.
Ramírez indicó que los trabajadores sindicalizados están abiertos a conversar sobre los mencionados montos para poner fin al conflicto, pero que la oferta debe ser mejorada. "Este fue nuestro petitorio inicial, pero nosotros somos tan flexibles como trabajadores que podemos llegar a un acuerdo", dijo.