Durante este mes el gobierno se comprometió a enviar a la Contraloría General de la República las bases de licitación del Transantiago, que incluyen nuevas reglas para el funcionamiento de las empresas. Así, se establece que los futuros contratos sumarán mayores castigos, por no cumplir con lo exigido en cuanto a calidad.

La licitación -que debería tener adjudicadas seis nuevas zonas de operación en febrero de 2018-, contempla cambios en el esquema de pago a los privados: habrá una ponderación más alta al kilómetro recorrido, que al pasajero transportado, fórmula que se revierte respecto a la que existe hoy.

La ministra de Transportes, Paola Tapia, explicó que, además, se aumentarán los descuentos por mal desempeño de un 3% a un 7,5% del total de recursos que se les cancelan a las firmas cada mes.

Hoy, las concesionarias son sancionadas cuando no llegan a lo exigido en el Indice de Cumplimiento de Indicadores, que incluye una evaluación de la atención al usuario, el estado de los buses, la detención en paraderos y la regularidad de los servicios. Y el incentivo económico por alcanzar las metas será de un 10% adicional a sus ingresos mensuales.

"Las empresas que lo hagan bien no van a tener ningún problema. Para nosotros es fundamental asegurar una atención de calidad", dijo Tapia. La propuesta, que debe pasar por la revisión del organismo de control, sería enviada la segunda quincena de mayo al organismo de control.

Reacciones

"Deberían haber más premios que descuentos, porque eso lleva a mejorar la operación", dice Juan Carlos González, gerente de la fundación Transurbano. Añadió que se ha planteado a la autoridad que se optimice la medición de estos índices, pues el monitoreo es hecho por "pasajeros incógnitos". "Es poco objetivo, depende de la impresión de ellos", dijo, por lo que propuso que se apliquen encuestas de satisfacción.

En tanto, la ministra se refirió a las declaraciones del candidato presidencial Sebastián Piñera, quien dijo que "se debe eliminar el Transantiago", por ser una política pública fracasada. Paola Tapia respondió que "el transporte público es una política de Estado, trasciende a los gobiernos". Añadió que el sistema "debe ser mejorado".