El chileno Pedro Pablo Hernández, futbolista del Celta de Vigo, se quejó de los arbitrajes que está sufriendo su equipo esta temporada, en especial del último de ellos en el partido que ayer disputaron contra Barcelona como local.
"Una cosa es que suceda con un equipo grande y otra que también pase con uno más chico. Pero nos está pasando siempre y nos da bronca porque uno entra en la cancha, hace un gran trabajo y en un descuido o un pequeño error del árbitro se te va el partido y te vas con las manos vacías", comentó el mediocampista celeste.
Hernández, la gran novedad en el once del argentino Eduardo Berizzo frente al Barça, mostró además su disgusto por la actuación del árbitro vasco Vicandi Garrido, quien, a su juicio, siempre favoreció a los azulgranas en las jugadas comprometidas.
"Está en los ojos de todos que esos pequeños detalles son los que hacen la diferencia. Por ahí vino la ventaja que se le dio al Barcelona. Pero nosotros no podemos centrarnos en eso, es otra gente la que debe hablar. Los de arriba ya saben lo que tienen que hacer porque siempre se equivocan en contra del Celta", acentuó el chileno.
El ex futbolista de O'Higgins se mostró "contento" por su actuación personal frente al líder pero "un poco triste" por la derrota, que evita que el Celta certifique matemáticamente su permanencia en la categoría.
"Le jugamos de igual a igual al Barcelona y por momentos controlamos el partido. Nos duele que nos hayan convertido en una acción a balón parado. Creo que hicimos un gran partido y nos merecimos más de lo que nos llevamos. Este partido nos debe reforzar de cara a lo que viene", ha manifestado.
Ha admitido, asimismo, que necesitaba "dar un paso adelante" y que se ha sentido "bastante cómodo" jugando en la posición de mediapunta, la misma en la que actuó la semana pasada con su selección en el amistoso ante Brasil.