Tres de cada cuatro franceses creen que François Hollande es un mal presidente de la República, revela un sondeo publicado hoy por el instituto Odoxa, según el cual ese porcentaje se eleva al 95 % entre los simpatizantes de derechas y baja al 45 % entre los de izquierdas.
El rechazo de la ciudadanía hacia el jefe de Estado, según esa encuesta realizada entre los pasados 21 y 22 de mayo, se reduce, pese a todo, dos puntos porcentuales respecto a un sondeo similar efectuado en abril.
La popularidad del primer ministro, Manuel Valls, también mejora ligeramente, hasta el 41 %, debido en gran parte a los apoyos recibidos en su propio campo.
Ninguno de los dos se coloca entre las 20 personalidades políticas preferidas entre la ciudadanía, listado encabezado por el exministro conservador de Exteriores Alain Juppé (41 %), seguido por el expresidente Nicolas Sarkozy (28 %) y por el actual ministro de Economía, Emmanuel Macron (27 %).
Entre los más detestados figuran tres integrantes del partido ultraderechista Frente Nacional (FN): su presidenta, Marine Le Pen (57 %); la sobrina de esta y diputada Marion Maréchal-Le Pen (56 %) y el vicepresidente de esa formación, Florian Philippot (51 %).