Un tribunal californiano desestimó hoy retirar los cargos que pesan contra el cineasta franco polaco Roman Polanski, quien se encuentra con detención domiciliaria en Suiza por un caso judicial que data de los años setenta.

La Corte de Apelaciones del Segundo Distrito de California tomó unánimemente esta decisión respecto al proceso judicial que tiene pendiente Polanski en EEUU por haber mantenido relaciones sexuales con una menor, un caso que sus abogados habían pedido sobreseer por una supuesta mala conducta del juez original.

El director se marchó a Francia en 1978 para evitar tener que responder ante los tribunales por violar a una niña de 13 años durante una sesión de fotos.

El panel, formado por tres jueces, dictaminó que la decisión tomada por un juez californiano hace un año de pedir la extradición de Polanski sigue vigente, y considera correcto hablar del cineasta como un "prófugo" de la Justicia estadounidense.

"Rechazamos desestimar el caso", dijo la jueza Laurie Zelon, quien también se refirió a la reclamación de la defensa sobre la actitud del juez que trató el caso en primera instancia y que falleció.

Los abogados de Polanski sostienen que el documental "Roman Polanski: Wanted and Desired" (2008) mostró una presunta falta de profesionalidad de los implicados en el caso y arrojó dudas sobre la validez del procesamiento del director de cine.

"Son alegaciones serias así que recomendamos a las partes que tomen los pasos necesarios para investigar y responder a estas peticiones", añadió.

Polanski fue detenido a finales de septiembre pasado cuando aterrizaba en Zúrich para recibir un premio, en virtud de una orden de captura de EE.UU. y consiguió la libertad condicional después de haber depositado la fianza de 4,5 millones de francos (3 millones de euros) establecida por los jueces suizos.