Con el objetivo de potenciar la prevención de la violencia doméstica y reducir su reincidencia con métodos alternativos a la privación de libertad, el Primer Juzgado de Garantía de Santiago y la Universidad Autónoma de Chile firmaron un Acuerdo de Cooperación, para que profesionales de esa casa de estudios entreguen asistencia psicológica y social a los imputados y víctimas, que no puedan costear un tratamiento privado.
La iniciativa surgió debido a la alta incidencia de la violencia intrafamiliar en la comuna de Pudahuel, con el consiguiente impacto en la vida de sus habitantes.
Esta es la segunda etapa de un proyecto que se gestó el año 2007, el que consideró que el tribunal destinara una sala exclusiva para realizar audiencias de formalización, salidas alternativas, juicios simplificados, abreviados y preparaciones de juicio oral, y otra sala exclusiva para el control y seguimiento judicial de las condiciones, medidas cautelares y penas accesorias fijadas, como la prohibición de acercarse a las víctimas, abandono del hogar y terapias sicológicas.
A las audiencias de control y ejecución de sentencias, pueden concurrir las víctimas, para hacer uso de su derecho a ser oídas por el juez y en ellas se propician contenidos socio educativos y un reforzamiento de un actuar ajustado a derecho, asegurándose que la situación de violencia está bajo control.
A la fecha, el tribunal ha registrado una disminución significativa de la reincidencia de la violencia doméstica, concretamente en los procesos penales por desacato.
La ceremonia fue encabezada por el presidente de la Corte de Apelaciones de Santiago, Jorge Dahm, la juez presidente del tribunal, Isabel Margarita Zuñiga, el vicerrector de la Universidad y el decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, Joaquin Julve y Ricardo Israel, respectivamente.
