El Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR) condenó hoy a 30 años de prisión al ex ministro del Interiores ruandés Callixte Kalimanzira por su participación en el genocidio de 1994 en el país en el que fueron asesinados más de 800.000 tutsis y miembros moderados de la etnia hutu.
El juez Dennis Byron, que emitió el veredicto en la sede del TPIR en Arusha, norte de Tanzania, concluyó que el 23 de abril de 1994 Kalimanzira acudió a las colinas de Kabuye, al sur de Ruanda, acompañado de soldados y policías para asesinar a miles de tutsis.
"Los refugiados tutsis de esa zona habían logrado huir de los ataques hasta ese día, pero no de las balas que asesinaron a miles de ellos", dijo el magistrado en su lectura del sumario de 14 páginas.
Byron añadió que Kalimanzira contribuyó asimismo en la provisión de armas a la milicia hutu extremista "Interahmwe", que junto con soldados del Ejército y parte de la población civil, fueron los ejecutores del genocidio, que comenzó a principios de abril de 1994 y terminó en julio de ese año, cuando una rebelión armada tutsi puso fin a las matanzas.
"Esta corte encuentra culpable al acusado, más allá de cualquier duda razonable, de haber instigado las matanzas ocurridas en las colinas de Kabuye", continuó el juez en presencia de Kalimanzira, que escuchó con serio semblante las palabras del magistrado.
El juez condenó además la negativa del ex ministro a desarmar a las milicias hutus en los últimos días del genocidio, y recalcó que "el acusado incitó a la multitud a seguir asesinando a sus vecinos tutsis".
Igualmente, se lamentó de que Kalimanzira, quien tiene educación universitaria y ocupó distintos puestos de poder hasta su nombramiento como ministro, "abusara de la confianza pública y contribuyera a las matanzas".
Como factor atenuante, el juez especificó que el acusado "no mató personalmente a nadie y sólo permaneció brevemente en los lugares donde se cometieron los asesinatos".
Además, valoró positivamente que Kalimanzira se entregara voluntariamente al Tribunal en mayo de 2005, período en el que vivía en Kenia con su familia.
"También se tendrán en cuenta los cuatro años que ha estado detenido" para computarlos como tiempo cumplido de su condena, señaló el juez.
El juicio contra Kalimanzira, que se inició el 5 de mayo del 2008, ha sido uno de los más rápidos en los 15 años de historia del TPIR, que en febrero condenó a 25 años de prisión al sacerdote católico Emmanuel Rukundo, tras hallarlo culpable de genocidio en las modalidades asesinato y exterminio.
El Tribunal especial de la ONU, que se puso en marcha para procesar a los culpables del genocidio de 1994, ha condenado hasta la fecha a 38 personas y sobreseído a otras seis.