Casi tres millones de personas indocumentadas podrían ser deportadas de Estados Unidos cuando el presidente electo, Donald Trump, asuma su mandatado en la Casa Blanca el próximo 20 de enero.

Según declaró en una entrevista para el "programa 60 minutos" del canal CBS -su primera aparición televisiva tras el triunfo electoral- al asumir deportará a los inmigrantes que tengan "antecedentes penales" afectando entre uno a tres millones de personas.

"Lo que vamos a hacer es tomar a la gente que son criminales y que tienen antecedentes penales, pandilleros, traficantes de droga, probablemente dos millones, podrían ser incluso tres millones, y vamos a echarlos del país o vamos a encarcelarlos", indicó Trump en su primera aparición televisiva tras el triunfo electoral.

Las palabras de Trump hacia los inmigrantes indocumentados en la entrevista fueron muy diferentes a las pronunciadas durante la campaña presidencial, cuando prometió crear "una fuerza de deportación" para expulsar a todos los indocumentados, incluidos a los mexicanos a los que llamó "criminales y violadores".

Además, durante la entrevista Trump indicó que, una vez que la frontera sea fortalecida, su gobierno determinará el futuro del resto de indocumentados que viven en Estados Unidos y a los que elogió por ser gente "fantástica".

"Son gente fantástica y tomaremos una decisión sobre ello. Pero antes de tomar esa decisión, tenemos que asegurar nuestra frontera", consideró Trump.

Por otro lado, Trump reiteró su deseo de construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México, aunque admitió que podrían alzarse "vallas" en "ciertas áreas" de los más de 3.000 kilómetros de la frontera entre los dos países.

"Para algunas áreas lo consideraría (alzar vallas), pero para otras, un muro es más apropiado. Soy muy bueno en esto, se llama construcción", resaltó Trump.

Cabe destacar que si Trump realmente cambia su planteamiento y propone deportar solo a los inmigrantes con antecedentes penales, sus políticas no se diferenciarían tanto de las implementadas por el presidente, Barack Obama, quien en noviembre de 2014 anunció medidas para expulsar a los indocumentados con récord criminal y no a las familias de indocumentados.

https://twitter.com/60Minutes/status/797824876383965184

REPUBLICANOS CONTRADICEN A TRUMP

Sin embargo, el presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., el republicano Paul Ryan, aseguró que Trump no planea crear una "fuerza de deportación" para expulsar a los indocumentados que viven en el país, como prometió durante la campaña electoral.

Ryan destacó que la mayor prioridad de los republicanos del Congreso y del presidente electo es fortalecer la seguridad en la frontera entre México y Estados Unidos.

"No estamos pensando en crear una fuerza de deportación. Donald Trump no está planeando eso", aseguró Ryan, quien rechazó que esa pueda convertirse en la prioridad de su agenda y la de Trump más adelante.

"Nuestro foco no está en eso (en crear una fuerza de deportación), estamos enfocados en asegurar la frontera, pensamos que lo primero y lo más importante antes de entrar en cualquier otro tema de inmigración es asegurar la frontera, saber quién entra y sale del país", añadió.