Parecen ser polos opuestos. Mientras que el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha apostado por el comercio, la apertura de sus fronteras y por acercarse más a México, el Presidente Donald Trump ha preferido el proteccionismo, ha impulsado un veto migratorio y ha llamado a sus vecinos "estúpidos". El ex mandatario Barack Obama tenía una excelente relación con Trudeau, tanto así que los medios bromeaban de que existía un "romance". Y ambos se volvieron a reunir en junio de este año, cuando Obama visitó Montreal. Pero con Trump la relación ha sido diferente.

A ocho meses de haber llegado a la Casa Blanca, Trump y Trudeau se volvieron a ver las caras luego de un encuentro en febrero de este año. En momentos en que comenzaba la cuarta ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), Trump señaló que ésta era "dura" y sugirió, una vez más, que Estados Unidos podía abandonar el acuerdo que rige desde hace 23 años.

"Veremos si podemos hacer los cambios que necesitamos", dijo Trump al recibir al primer ministro canadiense. "Tenemos que proteger a nuestros trabajadores", agregó. El mandatario alega que el pacto entre su país, México y Canadá es perjudicial para Washington y ha provocado la pérdida de empleos y un déficit comercial en el país.

Trump dijo tener una relación "increíblemente cercana" con Trudeau. Pero éste, junto con el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, impidieron en abril que el mandatario estadounidense decidiera retirar a Estados Unidos del NAFTA.

Trudeau buscaba rebajar las tensiones por el NAFTA y de acuerdo con funcionarios canadienses, el premier pretendía reforzar la forma en que los estadounidenses se benefician de Canadá, señaló el diario The Guardian.

Pero Trump amenazó con dejar a México fuera del tratado. "Es posible que no seamos capaces de lograr un acuerdo (con México) y es posible que sí", agregó. Al ser consultado de si podría alcanzar un pacto comercial con Canadá si no logra uno con México en las renegociaciones, Trump aseguró que "absolutamente".

El mandatario también aprovechó de amenazar a la prensa en frente de Trudeau. Trump apuntó contra NBC y dijo que ciertos reportes eran "pura ficción". "Es francamente asqueroso que la prensa pueda escribir lo que quiera", señaló. Esto, debido a un artículo sobre que Trump propuso multiplicar por 10 el arsenal nuclear de Estados Unidos. "Sé la capacidad que tenemos, y créanme es increíble, es masiva", señaló Trump.