El huracán María arrasó la semana pasada a Puerto Rico y las críticas no tardaron en llegar por la lenta reacción del presidente estadounidense, Donald Trump, en anunciar su visita la isla.
Y es que recién hoy el republicano confirmó que viajará al lugar para constatar la gravedad los daños y atender a las personas afectadas.
"Puerto Rico está con problemas tremendos, con inundaciones y derrumbes, y estamos buscando gente", dijo Trump. "Iré a Puerto Rico el martes", agregó.
También indicó que podría hacer una escala en las islas Vírgenes que también fueron afectadas por el paso del huracán.
Irma ya había golpeado gravemente a la isla, pero María tuvo un impacto mayor sobre la infraestructura del territorio, al punto que gran parte de los puertorriqueños todavía carecen de luz eléctrica.
Este lunes, el gobernador de la isla expresó su preocupación ante una posible "crisis humanitaria" en el territorio si Washington no tomaba "medida sinmediatas".