Una nueva irregularidad fue dada a conocer por el administrador provisional de la U. Arcis, Patricio Velasco, en respuesta a la demanda que interpuso Elisa Neumann, ex rectora del plantel, enviada al Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago. En el documento, el interventor acusa que la ex autoridad académica ejerció su cargo por más tiempo del estipulado en su contrato y que, además, aumentó su sueldo sin justificaciones.

Neumann presentó la demanda laboral hace algunas semanas exigiendo el pago de $ 83 millones. La psicóloga asegura que la entidad no cumplió con un acuerdo, por lo que el plantel le adeuda parte de su sueldo y una serie de bonos. En la demanda, la ex rectora señala que "en febrero de 2015 aceptó rebajar temporalmente la renta aludida ($ 3.722.000), a petición de las autoridades superiores, fijándose en $ 3.256.000, pero pactándose que, a contar de enero de 2016, mi renta mensual sería restablecida, ascendiendo desde entonces a $ 3.870.000", consigna el texto.

En el documento, Neumann asegura que cuando llegó el administrador provisional se le cesó del cargo de rector "sin previo finiquito del contrato respectivo ni concierto ni asentimiento de mi parte, rebajando mi renta al monto de $ 1.700.000".

De acuerdo a lo presentado por Velasco, Neumann efectivamente a partir del 1 de noviembre del 2014, cuando inició como rectora, comenzó a recibir un sueldo de $ 3.722.000. Sin embargo, aclaró que el cargo sería ejercido hasta el 31 de diciembre del 2014. Así, a contar del 1 de enero de 2015, Neumann debió retomar su cargo de directora de la Escuela de Psicología "y percibir por concepto de remuneración un sueldo base de $ 1.323.000, más asignación de movilización y colación de $ 60.000".

En el documento de respuesta enviado por Velasco se acusa, además, que "por razones que esta parte desconoce, la demandante continuó desempeñándose como rectora más allá del 21 de diciembre del 2014, específicamente hasta septiembre de 2015".

Durante ese periodo, señala el administrador, la ex rectora de la universidad "a partir de julio de 2015, decidió por sí y ante sí aumentar su sueldo base e incluir en sus liquidaciones distintos haberes cuya fuente es inexistente, como 'clases' y 'examen de grado y proceso'". Todo esto "sin dejar registro alguno" de estas presuntas labores.

Con todo, su sueldo base quedó en $ 1.652.404 a contar de octubre de 2015 y hasta su despido. Según Velasco, "desde que asumió esta administración y a la fecha del despido, la rectora no reclamó jamás por estas nuevas condiciones".

El abogado representante de Neumann, Jorge Blas, aseguró que va a "acreditar el 20 de febrero, cuando sea la audiencia, todo lo que se señala en la demanda, con documentos de respaldo".

"Decir que doña Elisa Neumann fue una especie de dictadora es calumnioso y ridículo, porque no solamente el administrador tiene un sueldo mucho más alto sin siquiera ver un progreso en la universidad, sino que son críticas que no tienen ninguna seriedad", subrayó Neumann.

Meta clave

La acción legal complica a la universidad en un momento clave, ya que se encuentra en período de matrícula y debe lograr inscribir 573 nuevos alumnos para continuar funcionando. Esto, en el marco de la crisis financiera que mantiene al plantel con una deuda de más de $ 8.000 millones, situación que se puede enfrentar sólo con la venta de las dos sedes de la U. Arcis más la llegada de nuevos estudiantes.

Dos personas son las que atienden en los módulos de admisión en la Universidad Arcis. Un par de visitas bastaron para corroborar que no hay mucho interés en el plantel. Al acercarse al stand de atención, explican las condiciones de la universidad: "La matrícula esta semana está a $ 90.000, pero la próxima subirá", advierte uno de los encargados del módulo de inscripción. Al ser consultados respecto del posible cierre de la institución, señalan que efectivamente la U. Arcis requiere llegar a una meta de alumnos por cada carrera y entregan un documento titulado "Declaración sobre el conocimiento de la situación académica e institucional de la U. Arcis".

Dicho papel señala que "de no lograrse el mínimo de matrículas requeridas, la universidad comunicará oficialmente esta situación, el 10 de marzo, a todos y cada uno de los nuevos estudiantes matriculados, de manera tal que tengan la oportunidad de matricularse de forma oportuna en otra institución".