Este año la encuesta de Ocupación y Desocupación en el Gran Santiago, elaborada por el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, cumple 60 años, reafirmando su carácter de "patrimonio estadístico nacional", debido principalmente a que es la única medición local que permite comparar datos en tal espacio de tiempo.
Sin embargo, el futuro del sondeo no está asegurado. Es más, podría incluso quedarse en estas seis décadas.
Esto, dado que la mayor parte del financiamiento de la encuesta (3/4), que proviene del Banco Central de Chile, está asegurada solamente hasta este año, ya que según el último contrato firmado entre las partes, se comprometió el presupuesto para 2015, con una posible renovación en los siguientes dos años (lo que se cumple en el actual ejercicio), dejando en la incertidumbre la realización de ésta en 2018 (el resto del financiamiento viene de Abif).
Así lo evidenció el propio director del Centro de Microdatos, Jaime Ruiz-Tagle, quien, en junio el año pasado, manifestó su preocupación al respecto -en el marco de una comisión de Trabajo en la Cámara de Diputados- sobre un eventual término de la encuesta ante la falta de financiamiento, aludiendo fundamentalmente a la capacidad de comparación del instrumento estadístico.
Sin definición
De acuerdo al ente rector, para 2017 "el Banco continúa financiando la encuesta dado que tiene contrato vigente con la U. de Chile", aunque reconoce que sobre la posibilidad de volver a financiar la medición , "no ha adoptado aún ninguna decisión al respecto".
De esta manera, a partir de enero de 2018 no hay certezas de cómo se sostendrá el pago de los más de $ 100 millones que significa realizar la encuesta.
De hecho, fuentes cercanas al proceso, afirman que el acuerdo adoptado en la última oportunidad consideraba que el centro académico iniciara acciones para conseguir otro tipo de financiamiento, y así ir reduciendo gradualmente el presupuesto otorgado por el BC.
Consultado por esta situación, el director del Centro de Microdatos, Jaime Ruiz-Tagle, enfatizó que "hasta la última encuesta de este año está financiada", pero que efectivamente "tendremos que conversar con el BC para ver si seguirán interesados en contratar la encuesta. Eso no ha ocurrido".
Ante este escenario Ruiz-Tagle advirtió que esta materia se debería discutir los próximos meses, precisando que "ellos (BC) nos han indicado que están dispuestos a conversar".
Contexto reafirmado por el ex decano de la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile, Joseph Ramos, quien además recalcó que también está en juego la encuesta de Percepción y Expectativas de la casa de estudios, ya que ésta se realiza con el mismo formulario de la medición de empleo.
Ante esta situación, David Bravo, director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la U. Católica y ex director del Centro de Microdatos (por 15 años), señaló que "es una excelente oportunidad para que el BC diga exactamente qué es lo que quiere hacer. Sería interesante porque hay un nuevo presidente y consejero, y corresponde que se analice al interior del Consejo".
Añadió que es necesario asegurar la continuidad de financiamiento, ya que sería una gran pérdida si eso no ocurriese. De hecho, sostiene que "en caso de no continuar financiando la encuesta, el BC debería colaborar con la U. de Chile para encontrar alguna fuente de que asegure su continuidad en el tiempo".
Cabe recordar que la encuesta no ha estado exenta de polémica, luego de que en la directora del INE, Ximena Clark, manifestara a mediados de 2016 que "es muy contrario a la buena práctica estadística tener dos encuestas que están midiendo lo mismo, enfatizando que "es una utilización ineficiente de recursos".