Hasta ahora es sólo una estatua de arcilla, pero ha generado controversia como si el proyecto para levantar el monumento más grande del mundo a Juan Pablo II (con 7,5 metros de cuerpo) ya estuviera instalado en el Barrio Bellavista, frente a la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile.
La iniciativa en honor al fallecido Pontífice ha enfrentado al sacerdote jesuita Felipe Berríos y al vicerrector de desarrollo de la U. San Sebastián, Luis Cordero: mientras el primero ha sugerido que la obra busca prestigiar a sus gestores antes que a la figura del Papa -con una obra que el religioso considera un desatino gigante-, el representante de esa casa de estudios (que donó la obra) ha dicho que el sacerdote es descalificador e inconsecuente, ya que nunca ha criticado las cuatro estatuas construidas en recuerdo de Alberto Hurtado en Santiago.
A esta controversia se sumó ayer el rector de la Universidad Alberto Hurtado, el sacerdote jesuita Fernando Montes, en apoyo a Berríos.
El proyecto también ha sido cuestionado por el secretario ejecutivo del Consejo de Monumentos Nacionales, Oscar Acuña, quien días atrás criticó que se comenzaran los trabajos sin la aprobación de la entidad, que cuenta con facultades para paralizar las obras. Acuña ayer sostuvo que ha surgido un principio de solución, ya que el lunes "nos han enviado los primeros antecedentes" del proyecto.
Ese día, Luis Cordero remitió al organismo una carpeta con imágenes y bosquejos de la iniciativa, que formará parte de una plaza con estacionamientos subterráneos, a donde sería trasladada la feria artesanal que hoy funciona frente a la Facultad de Derecho. Hasta hace un año la plaza se llamaba José Gómez Rojas, en recuerdo de un estudiante de Derecho apresado en 1920, torturado y luego llevado a la casa de orates, y que participaba en protestas universitarias de la época.
A los antecedentes de la Universidad se sumarán los que enviará entre el 14 y 16 de octubre la Municipalidad de Recoleta, para que la construcción del monumento sea votada por los 19 consejeros de Monumentos Nacionales, el próximo 15 de noviembre. Para discutir estos detalles se juntaron el viernes 25 de septiembre la alcaldesa de Recoleta, Sol Letelier, Acuña y el vicerrector Cordero.
PIDEN SERENIDAD EN EL DEBATE
Sobre la controversia que ha generado la obra, la alcaldesa Letelier dijo ayer que el Concejo comunal ratificó esta semana la estatua como proyecto del municipio y que también ha iniciado un período de participación ciudadana, de manera de socializar la obra.
La alcaldesa quiere que la obra se mantenga en Recoleta, tras las propuestas para trasladarla a Viña del Mar.
Letelier sostuvo que, más allá del tema religioso, la mediación papal de 1978 tuvo una gran importancia en la crisis con Argentina y que "tiene que haber tolerancia, no podemos entrar en una polarización que lo único que logra es hacer daño al país".