Este viernes, la empresa internacional que proporciona transporte privado a través de su aplicación móvil, Uber, se refirió a la protesta que ha surgido ante la posibilidad de que el servicio habilite el pago en efectivo para los clientes.
En esta línea, señaló que la manifestación "representa a un pequeño porcentaje" de los más de 13.800 socios activos que se encuentran en Chile.
"Nuestro foco no es sólo brindar una gran experiencia para los usuarios, sino también velar porque los socios tenga cada vez más ingresos", expresó en un comunicado oficial Uber, declarando que se han generado "más oportunidades económicas" y "canales de comunicación" con sus empleados.
Asimismo, la empresa transportista aseguró que el anuncio sobre la prueba piloto para aceptar las remuneraciones en este formato tiene como fin que el servicio "sea sinónimo de inclusión y accesible para la mayor cantidad de gente posible".
Actualmente, este método de pago ha funcionado "en más de 60 ciudades del mundo", según indicó la compañía, lo que incluye países como India, México, Perú, Vietnam, Reino Unido, Sudáfrica, entre otros.
El pago en efectivo exigirá que todos los usuarios de Uber también posean una cuenta con su nombre y datos personales, como: nombre, apellido, correo electrónico y número de teléfono.
A su vez, las funciones de seguridad de Uber seguirán disponibles antes, durante y después de cada viaje, incluyendo la opción de compartir el rastreo de la ruta con quien el pasajero desee.
A su vez, se mantendrá la posibilidad de calificar al conductor y dejar comentarios sobre el viaje.
Por último, Uber aclaró que no desactivará a quienes no acepten viajes en efectivo, sino que continuará teniendo "políticas claras para los socios".
Entre los motivos establecidos que pueden provocar una desactivación están el fraude, discriminación, seguridad o calidad. También se considera la tasa de cancelación de viajes, que ocurre cuando un conductor acepta una solicitud de viaje y luego la anula.