El Parlamento de Ucrania aprobó hoy la composición del nuevo Gobierno europeísta, que incluye a tres ministros de origen extranjero, mientras Kiev acelera las negociaciones para una tregua con las milicias rebeldes en el Este prorruso.
Tras una semana de arduas consultas entre los cinco partidos que incluyen la coalición mayoritaria, la Rada Suprema (Legislativo) aprobó por 288 votos a favor de un total de 450 un Ejecutivo que mantiene en sus cargos a los ministros clave.
La votación fue boicoteada por el Bloque Opositor, formación que incluye a antiguos ministros y aliados del derrocado presidente Víktor Yanukóvich.
Los ministros de Exteriores, Pável Klimkin, y Defensa, Stepán Poltorak, fueron confirmados en sus cargos a petición del bloque Petró Poroshenko, el ganador de las elecciones legislativas de octubre.
El presidente, Petró Poroshenko, destacó que Poltorak ha logrado poner orden en apenas mes y medio a unas Fuerzas Armadas, que se encontraban en un "lamentable estado" en junio pasado.
Tras las elecciones separatistas de principios de noviembre, Poltorak anunció que las fuerzas gubernamentales están preparadas para una nueva guerra contra los rebeldes, para lo que han sido movilizados reservistas y se han fortificado las posiciones en el frente.
También fue confirmado como ministro del Interior, Arsén Abákov, uno de los artífices de la movilización de voluntarios civiles en la guerra contra las milicias prorrusas en las regiones orientales de Donetsk y Luhansk.
El titular de Interior contaba con el respaldo del primer ministro, Arseni Yatseniuk, líder del Frente Popular, segundo partido más votado en las legislativas.
Además, el ejecutivo incluye al lituano Aivaras Abromavicius como ministro de Economía; a la estadounidense de origen ucraniano Natalia Yaresko al frente de Finanzas, y al georgiano Alexandr Kvitashvili en Sanidad.
En un gesto muy criticado por la oposición, Poroshenko concedió hoy la ciudadanía ucraniana por el procedimiento de urgencia a esos tres ministros horas antes de la votación parlamentaria.
Yaresko, quien nació en Chicago en el seno de una familia de ucranianos que emigró a EEUU después de la Segunda Guerra Mundial, trabajó en el Departamento de Estado y en la embajada norteamericana en Kiev, ciudad en la que vive desde hace 20 años.
Mientras, Abromavicius, residente en Kiev y casado con una ucraniana, es socio capitalista en el fondo de inversiones sueco East Capital, y Kvitashvili fue titular de Sanidad en el Gobierno del presidente georgiano Mijaíl Saakashvili.
Además, el gabinete de ministros incluye a miembros de los partidos Autoayuda (del alcalde de la ciudad occidental de Lvov), el Partido Radical de Oleg Liashkó y Batkivshina (Patria), de la ex primera ministra Yulia Timoshenko.
Se quedaron finalmente fuera formaciones que protagonizaron el movimiento de protesta conocido como Euromaidán como los ultranacionalistas de Sbovoda (Libertad), que denunciaron hoy que el nuevo Gobierno no representa a todos los ucranianos.
Uno de los principales objetivos del Ejecutivo es enmendar la Constitución con el fin de introducir las reformas políticas y económicas que exige la Unión Europea, Estados Unidos y el Fondo Monetario Internacional.
El objetivo programático de la coalición es cumplir con todos los requisitos con el fin de solicitar el ingreso en la Unión Europea en 2020.
Entre otras cosas, la coalición tiene intención de reformar la Constitución para revocar el artículo que coloca a Ucrania al margen de bloques militares con el fin de integrarse en un futuro en la OTAN, a lo que se opone terminantemente Rusia.
Al respecto, el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, anunció hoy que Kiev le ha informado sobre sus intenciones al término de la reunión en Bruselas de la comisión OTAN-Ucrania.
La aprobación del Gobierno coincide con el acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Kiev y los rebeldes en el aeropuerto de Donetsk, epicentro desde hace semanas de los combates, pese al alto el fuego declarado el 5 de septiembre pasado.