Evidentes eran ayer las ausencias en el Congreso de varios de los parlamentarios oficialistas que fueron derrotados en la elección del domingo.
En el sector se configuró un crítico escenario de los resultados, con balances cruzados en ambos partidos de la Alianza. Pese a que la UDI continúa manteniendo su hegemonía, la colectividad terminó siendo la principal afectada, debido a la baja de 38 a 28 diputados y la derrota en la senatorial de Santiago Oriente y Poniente.
El tema fue abordado ayer en el almuerzo de la bancada gremialista, cita en la que se exteriorizaron la molestia y la sorpresa de los legisladores por los resultados obtenidos, quienes manifestaron la necesidad de debatir a fondo las causas del resultado.
Así, se acordó agendar para el próximo 10 y 11 de enero el consejo directivo ampliado del partido, cónclave en el que se analizará en detalle el tema y se abordará el rumbo que seguirá la colectividad en los meses siguientes. La idea -explican- es no anticipar diagnósticos antes de la segunda vuelta presidencial del 15 de diciembre, para no afectar la campaña de Evelyn Matthei.
En RN, en tanto, celebraban ayer los triunfos de Andrés Allamand y Manuel José Ossandón, además del alza en dos diputados. Sin embargo, en el almuerzo de bancada algunos cuestionaron una falta de apoyo por parte de la directiva a candidatos derrotados. Además, se debatió en forma crítica el respaldo de la directiva que recibieron algunos candidatos durante la campaña, y se cuestionaron las caídas de Carlos Kuschel ante Iván Moreira y de Fernando Schultz frente a Ena von Baer.