Un balance de la situación de los cajeros automáticos realizado ayer por la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras de Chile (SBIF), estableció que de los 5.089 dispensadores ubicados fuera de las sucursales a nivel nacional, 766 de ellos estaban fuera de servicio debido a la movilización de los trabajadores de las empresas de transporte de valores Prosegur y Brinks.Esto equivale a un 15,1% del total de cajeros ubicados fuera de sucursales. De ellos, 308 tenían falta de dinero y 458 contaban con fallas técnicas.
En tanto, según el reporte, de un total de 2.757 los dispensadores ubicados dentro de las sucursales en el país, 54 estaban fuera de servicios por motivos de huelga, lo que significa el 2% del total de cajeros.
De acuerdo a la SBIF, "se continúa monitoreando el funcionamiento de los sistemas asociados al abastecimientos de efectivo en cajeros y sucursales bancarias con el objetivo de mantener un diganóstico actualizado de la situación".